Denuncian un ataque químico del régimen sirio contra rebeldes
Según organizaciones humanitarias, habría hasta 150 muertos. Duras condenas de Trump y del Papa.
Un presunto ataque químico del ejército sirio en la ciudad de Duma, el último bastión rebelde de Guta Oriental, cerca de Damasco, dejó este fin de semana decenas de muertos y centenares de heridos con síntomas de asfixia, y volvió a desatar la indignación de líderes mundiales.
Aunque el régimen de Bashar Al Assad y su aliado ruso desmintieron el uso de armas químicas el sábado en Duma, la comunidad internacional alzó la voz ayer contra el supues- to ataque que, según organizaciones humanitarias, podría haber dejado hasta 150 muertos, entre ellos gran cantidad de chicos y mujeres.
El presidente estadounidense, Donald Trump, no tardó en reaccionar a las informaciones. “Muchos muertos, incluidas mujeres y niños, en un ataque químico sin sentido en Siria. El área de atrocidades está bloqueada y rodeada por el ejército sirio, por lo que es completamente inaccesible para el mundo exterior. Putin, Rusia e Irán son responsables por apoyar al Animal Assad. Alto precio a pagar”, denunció en Twitter. La Unión Europea señaló a su vez que hay “indicios” de un ataque químico por parte del régimen sirio.
La Sociedad Médica Siria Americana (SAMS) y la Defensa Civil Siria afirmaron ayer en un comunicado conjunto que 48 personas fueron halladas sin vida en sus residencias o en los refugios donde se escondían de los bombardeos en Duma, ciudad controlada por el grupo rebelde Ejército del Islam. Acusaron a las fuerzas sirias de haber llevado un ataque con “gas tóxico” y hablaron de “más de 500 casos, en su mayoría de mujeres y niños” que presentan “síntomas de una exposición a un agente químico”.
Los afectados padecían síntomas de asfixia, pulsaciones cardíacas lentas, quemaduras en la córnea y un fuerte olor a una sustancia como el cloro. “Los síntomas informados indican que las víctimas se ahogaron por la exposición a sustancias químicas tóxicas, muy probablemente un elemento organofosforado”, señaló el comunicado de ambas ONG.
Las organizaciones indicaron que poco después del ataque, a las 19.45 del sábado, se produjeron nuevos bombardeos con barriles explosivos en las inmediaciones del hospital que estaba recibiendo a los heridos, lo que dificultó la salida de las ambulancias.
Por su parte, la Unión de Organizaciones de Cuidados y Socorro Médicos (UOSSM) dijo en otro comunicado que está convencida de que habrá más de 100 muertos porque está teniendo “dificultades extremas para llegar hasta las víctimas por el continuo bombardeo de Duma”. “Este es uno de los peores ataques químicos en la historia siria”, afirmó el presidente de la UOSSM, Ghanem Tayara.
Un video difundido por los Cascos Blancos en Twitter y grabado luego del presunto ataque químico, muestra una maraña de cuerpos sin vida, incluidos los de mujeres y niños, con espuma blanca saliendo de sus bocas. Fue imposible confirmar estas informaciones por fuentes independientes. El régimen afirmó que las acusaciones son una “farsa” y “fabricaciones”. Irán y Moscú, aliados del gobierno sirio, también desmintieron el supuesto ataque.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), que usa una red de informantes en toda Siria, no pudo confirmar las denuncias. Aún así, varios líderes mundiales además de Trump condenaron lo ocurrido. La cancillería británica dijo que si se confirma el ataque químico, sería “otra prueba más de la brutalidad de Al Assad contra civiles inocentes”.
El Papa Francisco también condenó el supuesto ataque químico: “Nada puede justificar tales instrumentos de exterminio contra la población”.
La ciudad de Duma es la última de la región de Guta Oriental que aún está bajo el control de los rebeldes, después de que las fuerzas gubernamentales hayan conseguido hacerse con la mayor parte de esa zona de las afueras de Damasco tras lanzar una ofensiva en febrero. Horas después del ataque, las autoridades sirias anunciaron un acuerdo para pacificar Duma con el Ejército del Islam.
Una investigación de la ONU y de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) acusó al gobierno sirio del ataque con gas sarín del 4 de abril de 2017 contra la localidad de Jan Sheijun, en manos de los rebeldes, que dejó unos 100 muertos. Tras el incidente, Trump ordenó bombardear instalaciones gubernamentales sirias. ■