Bajó la tasa de mortalidad infantil en la Provincia y es la menor de toda la historia
Entre 2016 y 2017 se registraron 229 muertes menos de menores de un año. También bajó la mortalidad materna.
En medio del conflicto financiero que condiciona la asignación de recursos en la Provincia, María Eugenia Vidal pudo mostrar algún resultado en materia de salud pública con el anuncio de una baja del 0,4% de la tasa de mortalidad infantil. Según el informe del ministerio de Salud bonaerense, “la más baja registrada en la historia de Buenos Aires”.
Entre 2016 y 2017, según datos oficiales, se registraron 229 muertes menos en menores de un año. En 2017 fueron 2.461 casos de defunciones contra los 2.690 del año anterior. También bajó 0,6% la tasa de mortalidad materna y el índice quedó equiparado con el registro obtenido en 2013. El año pasado se registraron 20 muertes maternas menos que en el período anterior, pasando de 93 a 73. Las autoridades lo atribuyen a “las acciones de cuidado de la madre mientras transcurre su embarazo y al cuidado de los recién nacidos en los equipos de neonatología”.
El sistema provincial de salud afectado a esta prestación se reparte 60% a cargo del estado y 40 en privados (clínicas , obras sociales). Desde hace meses, está en curso el Plan Integral de Guardias para mejorar el funcionamiento de las 58 guardias de hospitales provinciales dispuestos de mayor conectividad. “Venimos garantizando servicios de maternidad y neonatología en las doce regiones sanitarias”, mencionó el Ministro de Salud provincial, Andrés Scarsi.
El camino de una madre embarazada comienza en los Centros de Atención Primeria de la Salud (CAPS), porque allí –por cercanía- se produ- ce la primera consulta. Eso deriva a las futuras mamás a través de los corredores sanitarios, según el tipo de cuadro médico. Un embarazo que tiene posibilidad de ser riesgoso termina derivado a un hospital de alta complejidad. En bebés prematuros se hace un seguimiento de los primeros 6 meses luego del parto. En caso de fallecimiento de madre o hijo se activa un programa con equipo especializado encargado de auditor para “revisar todos los pasos” del camino de la embarazada.
Buenos Aires bajó los dos dígitos en ambos indicadores (TMI y TMM) hace unos cuantos años. Esa performance está por encima de casi todos los países de Latinoamérica y a medio camino en comparación con las naciones más desarrolladas del mundo. Muchas mujeres mueren por complicaciones que se producen durante el embarazo y el parto, o después de ellos. La mayoría de esas complicaciones aparecen durante la gestación y son prevenibles o tratables; otras pueden estar presentes desde antes del embarazo, pero se agravan con la gestación, especialmente si no se tratan como parte de la asistencia sanitaria a la mujer. Las principales complicaciones, causantes del 75% de las muertes maternas, son las hemorragias graves (en su mayoría tras el parto); las infecciones (generalmente tras el parto); hipertensión gestacional y abortos en prácticas médicas (o aún caseras) de alto riesgo, entre otras.
En la Argentina, cada tres horas una nena de entre 10 y 14 años se convierte en madre. Según UNICEF, existe comprobación que demostraría en las adolescentes mayores tasas de morbimortalidad perinatal que las mujeres adultas. La última información censal indica que en Argentina nacen anualmente entre 2800 y 3200 niños de madres menores de 15 años.
En el mapeo hay un dato contundente: la pobreza. “Las condiciones socioambientales, actúan sobre esta realidad específica”, explica Vidal. Su administración distribuye un vaso de leche diario a 360.000 beneficiarios e intensifica el Plan más Vida. Este programa consiste en la entrega de leche fluida (3 y 1/2 litros por semana por niño hasta la edad escolar o mujer en estado de gestación) y de la carga de una tarjeta para adquirir alimentos. El inminente traspaso de la Tarjeta Azul a la Tarjeta Verde Plan Más Vida bonaerense, debería significar un aumento en montos actuales de 900 pesos. El Plan más Vida tiene 464.000 beneficiarios. ■