Hubo caos en la Ciudad, cortes de vías y detenciones por el paro de subtes
Se agravó el conflicto con los metrodelegados
Un grupo de trabajadores, liderado por metrodelegados K y de la izquierda, cortó las vías en dos estaciones de la línea H del subte. La Policía porteña los desalojó y detuvo a 16, entre ellos, al dirigente Néstor Segovia. Por eso, cortaron el servicio en todas las líneas. Y viajar fue una pesadilla. Anoche libe- raron a todos. Luego de que el Gobierno amenazó con despidos y 150 trabajadores fueron suspendidos, los gremialistas levantaron la medida.
Lo que debía ser otra jornada de medidas de fuerza, como viene sucediendo desde hace más de un mes, terminó con incidentes, un paro total del servicio y una escalada en un conflicto que cada vez se tensa más. Los metrodelegados frenaron las seis líneas del subte y el premetro desde el mediodía de ayer, por las detenciones de 16 trabajadores que interrumpían la salida de formaciones de la línea H. Para la Ciudad, el paro es “ilegal” y no descartaron más sanciones y despidos.
Uno de esos detenidos fue Néstor Segovia, secretario adjunto de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP), a quien la Policía de la Ciudad se llevó preso luego de un enfrentamiento en los túneles de la estación Las Heras. Horas después, el gremialista tuvo que ser internado en el hospital Argerich porque sufrió un pico de presión.
Anoche, finalmente Segovia quedó en libertad y se anunció que el paro era levantado, con la consiguiente normalización del servicio hoy y la liberación de molinetes de 10 a 12.
A media tarde, la operadora Metrovías confirmó que la empresa envió 150 telegramas de suspensión a los trabajadores involucrados en el paro de las cinco líneas. Aclaró que 114 de ellos fueron para delegados gremiales que cuentan con tutela sindical.
A la tarde, la mitad de los detenidos ya habían sido liberados, porque no tenían antecedentes policiales. A 15 de los detenidos se les imputan los delitos de atentado y resistencia a la autoridad (artículo 237 del Código Penal), junto a interrupción de medios de transporte y comunicación (art. 194). Y al restante le abrieron una causa contravencional por infringir el artículo 69, que pena a quienes afecten el funcionamiento de servicios públicos.
Una de las causas, con siete detenidos, cayó en la Fiscalía en lo Penal y Contravencional de Faltas N° 35, a cargo de Celsa Rámirez. Las otras se dividieron entre la Fiscalía N° 20, a cargo de Juan Rozas (por la contravención), y la N° 30, de Daniela Dupuy, a cargo del expediente que involucra a Segovia.
"Desde las 12 no va a andar ni un solo subte, hasta que no liberen a los compañeros vamos a parar toda la red. Esto es producto de Rodríguez Larreta. El quería que paremos, que afectemos a los usuarios, vinieron a reprimir a nuestros compañeros, hasta que no los suelten no va a haber subtes", gritaba ayer al mediodía Roberto Pianelli, el secretario gene- ral de la AGTSyP. “Hicimos 25 días de protesta para no afectar, pero ahora no nos dejan otra alternativa que paralizar el servicio".
Los incidentes empezaron temprano, cuando la empresa intentó mover una formación para prestar servicio de emergencia y los trabajadores lo impidieron. Dos estaciones de la H concentraron el conflicto: Caseros y Las Heras. En esa última, alrededor de las 10.30 se desplegó un amplio operativo policial con la infantería que, según los metrodelegados, fue "para apretar a los compañeros".
Tras una negociación con la Policía, se acordó que los trabajadores dejaran las vías para subir al andén. Allí se registraron forcejeos y corridas, y se escucharon detonaciones que los metrodelegados denunciaron como disparos con balas de goma.
"Una locura inaudita. Bajaron tres carros de Infantería. Intentaron sacarnos del lugar de trabajo. Los compañeros increparon al comisario, no tenía orden, se produjo un forcejeo y desde la parte de arriba tiraron balas de goma, aunque por suerte no le pegaron a ninguno. Es una vergüenza lo que hace Rodríguez Larreta, que quiere resolver un conflicto gremial a balazos de goma en lugar de en una mesa de negociación", sumó Pianelli.
En la estación Caseros el conflicto empezó antes, a las 9:30. Seis hombres y una mujer colocaron piedras y un pedazo de escalera en el medio
de las vías. "La Policía los intimó al cese, pero resistieron, por lo que ante la flagrancia los detienen", explicó a
Clarín la fiscal Celsa Ramírez. "Entendemos que una manifestación es hacer un paro, pero poner en peligro una formación y el servicio de transporte es un delito", agregó.
El conflicto comenzó hace cinco semanas. Los metrodelegados venían haciendo paros rotativos y levantamiento de molinetes, en reclamo de que los dejen participar de la parita
ria. El acuerdo salarial lo firmó la UTA, el sindicato que tiene personería gremial.
Al referirse a los telegramas de suspendión, en una conferencia de prensa, el jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, aseguró: “El paro es ilegal. Y no es contra el Gobierno, es contra la gente. Los metrodelegados piden reabrir la paritaria, pero esto no se puede hacer, ya hubo un fallo de la Corte Suprema y hay que respetar la ley. Cortaron las vías, impidieron trabajar a otros empleados y agredieron a la Policía a piedrazos. Ya se aplicaron descuentos y suspensiones, y si corres- ponde no descartamos que haya despidos”.
El subte amaneció con tensión. Es que en la H y en la E se desarrollaba un paro desde las 5 y hasta las 12. La medida era conocida para los pasajeros: había sido informada con antelación y formaba parte de un plan de lucha de los trabajadores, quienes reclaman participar de la paritaria.
La semana pasada los metrodelegados habían desarrollado el mismo esquema en las otras cuatro líneas, en días rotativos. Pero que fuese anunciado y que el Gobierno porteño pusiera colectivos con un recorrido similar a las líneas suspendidas, no impidió que la red subterránea colapsara.
La A y la B sufrieron el aluvión de pasajeros que se mudaron en forma temporal. Hubo demoras y vagones repletos, más de lo habitual.
Además, la línea D circuló con servicio limitado entre Catedral y Carranza, por la atención a un pasajero. A través de las redes, los usuarios se quejaron por las demoras en el servicio del transporte. ■
El paro es ilegal. No se puede reabrir la paritaria, ya hubo un fallo de la Corte”. Felipe Miguel
Jefe de Gabinete porteño
Rodríguez Larreta quería que paremos, vinieron a reprimir a los compañeros”. Roberto Pianelli
Secretario General de la AGTSyP