El crack con una vida en España que sigue hablando argentino
Ahora que existe amor incondicional entre los argentinos y Lionel Messi, conviene sentenciar algo que siempre se supo, pero que algunos buscaron poner en duda: Messi es tan argentino como el que más. Ya no se escuchan aquellas voces maliciosas que lo tildaban de “europeo” por no saber el Himno Nacional o por no tirarse al piso a embarrar la camiseta celeste y blanca. Resulta sorprendente cómo un niño que abandonó el país a los 13 años sigue hablando como si viviese a la vuelta de la esquina. Todos los modismos argentinos conviven en Messi. Tal vez el mejor jugador del mundo encontró en el modo de hablar la manera de estar siempre en su tierra, la herramienta para sortear el desarraigo.
La palabra que más repite Messi es “petacular”. Así, sin la e, la s y la c. De vez en cuando dice “epetacular”, sin la s ni la c. No es lo único. En las últimas semanas, el crack rosarino brindó entrevistas en Canal 13 y en TyC Sports. Analizando su discurso en los reportajes se pueden encontrar varias expresiones nuestras. Habla de “laburar” y no de trabajo; dice que a su hijo Thiago “le gusta el fulbo”; recuerda que su viejo nunca fue de “cagarlo a pedos: era la vieja”; y asegura que “en el Mundial la vamo’ a pelear”.
Aunque no lo parezca, no es sencillo mantener el modo de hablar cuando se vive demasiado tiempo afuera (Messi lleva 17 años en Barcelona). Se pueden buscar otros ejemplos semejantes al de la Pulga y no para tildar de cipayos o algo por el estilo. Osvaldo Ardiles se fue a vivir a Inglaterra cuando tenía 26 años, David Trezeguet, a Francia con 18, Pedro Pablo Pasculli, a Italia a los 25, y Claudio Caniggia, a los 21. Todos los mencionados hablan distinto que los argenti- nos, con otra cadencia, con distintas palabras, con otra melodía. “Es imposible que no se te pegue la tonada después de tantos años”, comentó Pasculli en una entrevista.
Se sabe que a Messi le gustan el mate, el dulce de leche, el asado, los perros, la siesta y estar en familia. Escucha música nacional y mira canales de acá a través de un decodificador. Es tan argentino Messi que a Maradona le dice “El Diego”. “La del Diego es palabra sagrada”, graficó.
El mejor jugador del mundo explicó por qué habla como habla, incluso con más tonada argentina que rosarina. “Cuando iba al colegio en Barcelona hablaba como hablan allá para repetir las cosas porque nadie me entendía. Una vez que llegué al vestuario de Primera me dije ‘ya está’. Había brasileros, franceses... Ahí volví a hablar normal”, se sinceró.
“Nosotros somos pechos fríos, cagones que no ganamos finales”, dice Mes- si con decepción, ese vil sentimiento que de a poco va dejando de lado. La Pulga ya no está tan en guardia con sus compatriotas. Y sus paisanos -nosotros- lo mimamos como corresponde. En definitiva, es lo que se merece por ser el mejor representante del país en el mundo (más precisamente desde Barcelona, su casa por adopción como la describió en redes sociales). Por ser tan argentino como el que más. ■