Datos que traerán penas más duras
El relevamiento que muestra el escaso grado de condenas para quienes matan al volante fue tenido en cuenta por la comisión que elaboró el anteproyecto de reforma del Código Penal, que propone penas más duras para este tipo de casos. La iniciativa eleva de 6 a 7 años de prisión el castigo en casos de homicidios imprudentes en siniestros viales, en los casos en los que el conductor escape tras el hecho o lo cometa manejando ebrio o drogado, yendo a velocidad excesiva o mientras participa de una picada. Se busca además que, frente a ciertos agravantes, los que matan con su vehículo vayan presos sí o sí.