Destrabado en la Justicia, el subte se va a $ 12,50
Se trata de un ajuste del 67%. El boleto del Premetro subirá un 60%, a $ 4. El incremento había sido bloqueado por una cautelar en mayo, a raíz de un amparo.
La Justicia porteña destrabó el aumento de la tarifa del subte que buscaba aplicar el Gobierno de la Ciudad, y que estaba frenado por un amparo. Y desde mañana, subirá un 64%, de $ 7,50 a $ 12,50.
La medida cautelar que suspendió el aumento, revocada ayer, fue ordenada en mayo por la jueza Patricia López Vergara, a raíz de un amparo presentado por los legisladores de izquierda Patricio del Corro y Myriam Bregman y el metrodelegado Claudio Dellecarbonara. En ese momento el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta pretendía subir el pasaje de los actuales $ 7,50 a $ 11. Pero el cuadro tarifario contemplaba un segundo aumento en junio a $ 12,50.
Fuentes de Sbase confirmaron que, tras la decisión de la Justicia, el costo de un viaje saltará directamente de $ 7,50 a $ 12,50. El aumento impactará en el bolsillo de las 1.300.000 personas que viajan a diario en el subte. El boleto del Premetro pasará de $ 2,50 a $ 4, lo que implica una suba del 60%. El abono social será de $ 7 y el viaje será gratis para jubilados, pensionados, personas con discapacidad y chicos con boleto estudiantil.
El nuevo valor entrará en vigencia mañana, cuando sería publicado en el Boletín Oficial. Ahora, Metrovías está realizando algunas actualizaciones en sus sistemas para poder aplicar el cambio.
Con la nueva tarifa, seguirán los descuentos previstos para los viajeros frecuentes. El costo para quienes realicen hasta 20 viajes será de $ 12,50. A partir del 21 el viaje saldrá $ 10, desde el 31 será de $ 8,75 y, desde el 41 en adelante, de $ 7,50. El Premetro seguirá teniendo una tarifa plana, ahora de $ 4. Estos beneficios se complementan con la Red Sube, que aplica rebajas del 50% y del 75% cuando se combinan dos o más medios de transporte.
Cuando convocaron a una audiencia pública para implementar el aumento, en abril, las autoridades porteñas establecieron la tarifa técnica del servicio en $ 18. Esa cifra, que es la que se cobraría sin subsidio, surge de dividir los costos de explotación, que según Sbase son de $ 5.634,10 millones por año, por los 312,4 millones de pasajeros que pagan boleto.
Pero los amparistas argumentaron que el aumento debía suspenderse hasta que se realizara “una auditoría pública integral de la que puedan obtenerse los costos del servicio, ganancias y destino de los fondos estatales recibidos por Metrovías y las erogaciones realizadas por el Gobierno porteño y Sbase por todo concepto”.
La jueza López Vergara les dio la razón y frenó la suba hasta que se resolviera la cuestión de fondo. Entre otras cosas, sostuvo que la falta de reglamentación del procedimiento para aumentar la tarifa “impedía la transparencia propia del adecuado manejo de los fondos públicos”.
El Gobierno porteño apeló y ahora la Cámara revocó la cautelar que suspendía el aumento. “No corresponde dejar sin efecto las resoluciones que aprueban un cuadro tarifario sobre la base de meras tachas al método empleado por la autoridad competente”, dice el fallo. “Los actos administrativos regulatorios llevan consigo una presunción de legitimidad. Y pesa sobre quien los impugna la carga de demostrar que son inválidos”, sostiene.
“La controversia es por los costos que se toman en cuenta para la tarifa técnica, que incluyen hasta cenas de $ 70 mil de directivos de Sbase. No respondieron ni una de las objeciones planteadas. Lo cierto es que el Gobierno porteño fija la tarifa técnica que se le ocurre y ahora la Justicia está convalidando la estafa que le están haciendo a millones de usuarios”, sostuvo Dellecarbonara.
La tarifa del subte no se modifica desde octubre de 2016 y en el Gobierno porteño estaban impacientes por implementar el aumento. Según el Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte, hasta el 15 de julio la pérdida por el freno a su aplicación ascendía a $ 282,4 millones. Y, por cada día a partir de esa fecha, se sumaron $ 3,7 millones.
Hasta fines de 2011, la tarifa del subte estaba congelada en $ 1,10 y el Gobierno nacional cubría con subsidios los aumentos de los gastos operativos. En enero de 2012, cuando se con-
cretó el traspaso del servicio de la Nación a la Ciudad, el Ejecutivo porteño - a cargo de Mauricio Macri- incrementó el boleto en un 127%, a $ 2,50. Desde entonces, la tarifa acumula un aumento del 581%. Y desde mañana, del 1.036%.
La tarifa del subte había quedado desactualizada frente a la de los colectivos. Y por eso muchas personas se habían volcado a viajar bajo tierra, lo que según fuentes del sistema SUBE, hizo que la cantidad de pasajeros del subte aumentara un 15%.
La diferencia iba a ampliarse mucho más a partir del 15 de agosto próximo, cuando el pasaje mínimo de colectivo saltará de $ 10 a $ 11. Un mes después subirá a $ 12 y en octubre pasará a $ 13.
La tarifa de $ 7,50 del subte había quedado atrasada con respecto a la de los colectivos.