Por la devaluación, la actividad de la industria cayó 8,1% en junio
Se trata de la baja más pronunciada de la actividad desde 2002. Fue el mes de la disparada del dólar y del salto brusco de las tasas de interés. Qué pasa con el empleo.
Las cifras del Indec registraron un fuerte descenso de la industria respecto del mismo mes del año pasado. En el año, la actividad se redujo al 1%. La construcción, después de un período positivo, tuvo su primera caída en 15 meses.
En junio se desplomó la actividad industrial: cayó 8,1% con relación a un junio de 2017, de acuerdo al Estimador Mensual Industrial (EMI) que elabora y difunde el INDEC.
Esta caída -que se suma a la de mayo (-1,2%)- anula casi todo el avance que tuvo el sector en los primeros meses del año y acumula al cierre del primer semestre un alza de sólo el 1%.
Con este bajón, el nivel de la producción industrial de junio retrocedió casi 9% por debajo del nivel de igual mes de 2015. Y es la mayor caída desde agosto de 2002 .
Las cifras reflejan el impacto que tuvo la devaluación, la disparada de la tasa de interés, la aceleración de la inflación y el achique de la demanda interna, en especial sobre este sector de la producción.
Lorenzo Siugaut Graviña, economista-jefe de Ecolatina dice que “el impacto de la depreciación del peso entre fines de abril y junio de 2018 explica la caída de las principales ramas fabriles. Esto se debe a la distorsión de precios relativos que encareció gran parte de los insumos requeridos por la producción manufacturera. Al mismo tiempo, la aceleración de la inflación y la fuerte suba de tasas de interés desplomó la demanda inter- na”. El 90% los bloques industriales registraron caídas en junio.
Con relación a junio de 2017 se observan disminuciones en la refinación del petróleo (-19,9%), la industria automotriz (-11,8%), los productos de caucho y plástico (-11,1%), la metalmecánica, excluida la industria automotriz (-10,9%), la industria textil (10,8%), la elaboración de sustancias y productos químicos (-10,0%), la industria del tabaco (-9,7%), la industria alimenticia (-5,4%), la edición e impresión (-4,2%), los productos minerales no metálicos (-3,7%) y el bloque de papel y cartón (-1,2%). Por otra parte, las industrias metálicas básicas registran una suba de 9,8% por el incremento del 11% en la producción de acero.
Hacia adelante, para el tercer trimestre casi la mitad de las empresas ( 45,8%) anticipa una baja de la demanda interna; 41,2% prevé un ritmo estable; 13,0% espera un aumento. En exportaciones los números son menos negativos ya que el 49 % no anticipa cambios en sus exportaciones totales; 33,3% espera una suba y 17,7% vislumbra una disminución.
Un sector crítico es la construcción porque “para el período julioseptiembre de 2018, según la encuesta cualitativa, el 65,6% de las empresas dedicadas principalmente a obras públicas y el 45,9% de las firmas que realizan principalmente obras privadas, prevén que disminuirá el nivel de actividad del sector”.
En tanto, en materia de empleo industrial, el grueso ( 70,4%) no espera cambios en la dotación de personal, pero del resto son más las empresas que espera achicar sus dotaciones de personal ( 21%) que las que esperan tomar más gente (8,6%).
“Respecto a la cantidad de horas trabajadas del personal afectado al proceso productivo, 63,4% de las empresas no anticipa cambios; 27,1% anticipa una caída; 9,5% prevé un aumento”, señala el Informe.
Ecolatina señala que “el empleo industrial está cayendo desde el segundo trimestre de 2016. En particular si consideramos que la industria creció 3% en 2017 y el empleo cayó en promedio 3,3% es esperable que ante un panorama más desalentador, el empleo continúe retrocediendo”. ■