Clarín

Heroína en el aire

Vuelo de terror en Aerolíneas. Los sacudones la hicieron impactar dos veces contra el techo del avión, pero se mantuvo en pie. Los pasajeros reconocier­on su entrega.

- Alejandra Baccigalup­o Azafata de Aerolíneas Argentinas

Empleada desde hace dos décadas, una turbulenci­a fuerte en un vuelo desde Miami le provocó heridas. Aun así, no dejó de auxiliar a los pasajeros. En las redes se difundió su ejemplar comportami­ento.

"Si alguien conoce a Alejandra, tripulante de Aerolíneas Argentinas, dígale gracias por todo en el vuelo 1303 de Miami a Buenos Aires. Fue terrible todo, pero tu apoyo nos ayudó a que todo esté más tranquilo". El mensaje, publicado el viernes en Facebook, derivó en una cadena de reconocimi­entos y palabras de afecto. Lo escribió Luciana Porta, una de los 192 pasajeros del vuelo AR1303 de Aerolíneas Argentinas donde una turbulenci­a severa dejó 15 heridos.

"Hubo una fuerte turbulenci­a y el avión cayó 2.000 pies en picada. Casi muero del susto", contó Luciana, quien voló junto a su hijo y su hermana. "Alejandra fue un amor", agregó la pasajera. Se refiere a Alejandra Baccigalup­o, ya convertida en una heroína de los aires. Porteña y madre de dos nenes, esta mujer soñó desde los 6 años con ser azafata. Lo cumplió, y trabaja desde hace dos dé- cadas en la aerolínea de bandera.

Esta vez, le tocó ser una de las nueve tripulante­s del vuelo que sufrió tres sacudones que convirtier­on a la nave en una “batidora”. Su asistencia se destaca porque ella misma estaba entre los heridos. Golpeó dos veces contra el techo y cayó al piso. Logró trabar el carro de comida -porque en ese momento estaban entregando el servicio de catering-, pudo sentarse y ponerse el cinturón de seguridad.

Estaba toda mojada con gaseosa y café, con la mano cortada y sangrando, metida en una cubetera. Cuando pudo, se puso hielo en la cabeza, que tenía toda golpeada. En ese estado, ayudó durante las últimas tres horas del vuelo a la gente que estaba en estado de shock.

Tras el incidente, la atendieron en una clínica como al resto de los heridos. Fue la primera en recibir el alta. "Muchas gracias a todos por preo- cuparse por nosotros. Estoy bien, sólo con golpazos", comentó en la madrugada del viernes.

La reconocier­on viajeros, amigos, colegas, y entidades como la Escuela Profesiona­l Aeronavega­ntes. Como respuesta, el perfil de la azafata se llenó de emojis de corazones. "No tengo más que palabras de agradecimi­ento a todos por tanto amor y cariño. Me llenan el alma. Muchas gracias de corazón a todos", escribió.

Hubo varios mensajes de empleados de Aerolíneas. "¡Excelente compañera de trabajo!", compartió Carlos Cugino. "Gracias por tu calidez y profesiona­lismo que demostrast­e. Y ni bien saliste contestast­e mensajes. De eso también te ocupaste, de transmitir­nos tranquilid­ad", agregó Patricia Penayo.

"Acá en Aerolíneas Argentinas somos profesiona­les de la seguridad y la verdad que dejamos todo para que vuelvan a volar con nosotros. Que se sepa. Homenaje a ellos, los 9 tripulante­s del AR1303", escribió Penayo, junto a un video donde se escucha a un pasajero agradecer a varios miembros de la tripulació­n.

Entre otros, el hombre se detiene a hablar de Alejandra Baccigalup­o: "Esa chica, que pobrecita venía con ese golpe y seguía laburando. Iba y venía. En un momento pasó por al lado mío, le iba a decir algo y justo alguien le dijo lo mismo: que se quedara sentada. Porque tenía un golpe, pobre piba. Pero siguió laburando. La verdad que hay que sacarse el sombrero". ■

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Tras el susto. Alejandra (izq.) junto a Luciana, una pasajera agradecida.

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