El museo que guarda la historia de los porteños cumple 50 años
Es el de la Ciudad, que creó el arquitecto Peña. Festeja con una muestra de objetos cotidianos.
Nació en 1968 a partir de una destrucción: la que se hizo para ensanchar la avenida 9 de Julio. Lo creó el arquitecto José María Peña para salvaguardar desde ornamentos hasta portones rescatados de demoliciones. Pero lo que empezó casi como un museo de arquitectura, con el tiempo, se fue nutriendo de viejas postales, planchas, osos de peluche, recuerdos de Mar del Plata, fonógrafos, ruleros y toda clase de objetos entrañables donados por los vecinos. Así fue que el Museo de la Ciudad se convirtió en el espacio que atesora la historia íntima de los porteños.
Para celebrar sus 50 años, ayer inauguró la exposición “Mostramos todo, no nos quedamos por nada”. El título no es una exageración: exhibe un desparramo de cosas de épocas diversas. Valijas, un banderín del equipo de José con el que Racing salió campeón en 1966, una chata, perchas, relojes... Ningún objeto tiene un cartel explicativo. No hace falta. Ca- da visitante va a saber descubrirlos y se va a poder identificar con alguno. “Esta muestra reúne elementos que son nimios, cotidianos. La manera de festejar del Museo es formar un volcán con la colección y hacerla estallar para que la gente pueda ver cuál es la materia con la que trabajamos. Porque en los museos contamos historias con objetos”, explica Ricardo Pinal, el director del Museo de la Ciudad.
La tarea de Pinal es difícil, porque tiene que continuar con la fuerte impronta que dejó el arquitecto Peña. “Era un tipo extraordinario, fue el primer gran preservacionista y además le puso humor a los museos”, reflexiona Pinal.
Peña, quien murió en 2015, sigue siendo alma del Museo. En 1967, fue él quien le propuso al intendente Manuel Iricíbar abrir un espacio para preservar objetos representativos de la historia de la Ciudad . Lo que no se esperó es que Iricíbar lo nombrara director del Museo. “No está en mis planes, pero como soy un inconsciente, voy a aceptar”, le respondió el arquitecto, quien también fue el impulsor de otro clásico del barrio: la feria de
San Pedro Telmo.
Ahora muchas de esas pequeñas grandes cosas pueden verse en la muestra, en Defensa 219/23. Con entrada gratuita, podrá visitarse desde hoy hasta el 17 de marzo, todos los días, de 11 a 18.w