Homenaje en la Chacarita a un siglo de la Primera Guerra
Será hoy desde la 10 de la mañana. Asistirán los embajadores de Francia, Inglaterra y Alemania.
Once de noviembre de 1918. Se firma la paz más frágil que vivió el mundo entre 1918 y 1939: el armisticio que puso fin a la Primera Guerra Mundial. Hoy se cumplen 100 años y representantes del Reino Unido, Alemania y Francia, las tres potencias involucradas en aquella firma histórica, pondrán fin a una división eterna. ¿Dónde? En el cementerio de la Chacarita. Allí, inaugurarán un portón que permitirá el paso entre los cementerios británico y alemán. Derribarán el muro instalado en 1920 para dividirlos. Y con él, los últimos resabios de rencores bélicos.
A la celebración asistirán los embajadores, el viceministro de Defensa, Horacio Chignazolo, las comunidades argentinas de ascendencia británica y alemana, gaiteros y hasta un coro que cantará “Imagine”, de John Lennon. Un culto que recordará a los miles de voluntarios británicos, alemanes y franceses que viajaron desde nuestro país y murieron en la Gran Guerra. Comenzará a las 10.15.
Los dos cementerios comenzaron a funcionar en diciembre de 1820. Un grupo de comerciantes ingleses consiguió un lugar donde inhumar los restos de inmigrantes no católicos. Lo bautizaron Cementerio de Disidentes. “Hubo una mudanza en 1833 al cementerio Victoria (hoy Plaza Primero de Mayo en Balvanera). Pero en 1892 el municipio nos pidió que nos retiráramos porque los vecinos ya no querían vivir junto a los muertos. Y nos cedieron estas tierras en la Chacarita”, detalla el director del cementerio británico, Andrew Gibson.
La historia de los dos cementerios se oscureció el 28 julio de 1914. La Gran Guerra motivó la creación de un cerco para separar los terrenos de dos países enemigos. En 1922, ese cerco se consolidó como un muro de 200 metros.
Según el Archivo Histórico de la Ciudad, 32 mil argentinos lucharon en el ejército italiano, 4.800 en el británico y 5.800 en el francés. Clarín accedió a una de las cartas que un soldado británico que viajó desde nuestro país envió a su familia desde el frente de batalla y que este domingo leerá un alumno del colegio St George’s College de Quilmes. “Todo está muy tranquilo y pacífico y ahora que no escuché un disparo en cuatro días, estoy empezando a olvidar que hay una guerra”, escribe el inglés Thomas Colvill Jones.
Con 20 años, se convirtió en el primer argentino de la Primera Guerra Mundial que decidió alistarse como voluntario de la comunidad angloargentina. Derribó 11 aviones alemanes hasta que lo hirieron. Fue enterrado en el cementerio del Sur-Oeste de Stahnsdorf. Su nombre aparece en el War Memorial ubicado en el Cementerio Británico, justo donde hoy un alumno le pondrá voz a sus palabras. También ahí estará Ronnie Scott, otro héroe de la historia, el argentino que tiene 101 años y también viajó como aviador voluntario para pelear contra Hitler en la Segunda Guerra Mundial. ■