Los incendios forestales arrasan California y provocan 25 muertos
El pueblo de Paradise, cerca de Sacramento, es el más afectado. En el sur, el fuego amenaza a la exclusiva Malibú.
Al menos 25 personas murieron y 110 están desaparecidas por los incendios que arrasan el norte y sur de California. El Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California ( Cal Fire, en inglés) informó que hay 16 incendios activos. Más de 250.000 personas fueron evacuadas de sus hogares, para escapar de los tres incendios más graves: Camp Fire, Hill Fire y Woolsey Fire.
El más grave de todos, Camp Fire, se inició el miércoles 7 en el condado Butte y los bomberos no lograron impedir que destruyera el pueblo de Paradise, de 27.000 habitantes. Camp Fire provocó al menos 23 muertos y dejó el pueblo en ruinas. El comisario del condado de Butte, Kory Honea, dijo que se pidió auxilio a expertos de la Universidad de California para identificar 14 cuerpos encontrados el sábado en Paradise, porque “sólo hay fragmentos de huesos”. Este fuego se extiende en un área de 440 km cuadrados y destruyó 6.700 viviendas. Bill Murphy, vocero de Cal Fire, dijo que las ráfagas de viento pronosticadas para este lunes expandirán el fuego. El pueblo de Chico, un área al norte de Sacramento (la capital del Estado) recibió órdenes de evacuación para 93.000 habitantes.
El incendio Woolsey se inició el último viernes en el sur de California cerca de la exclusiva playa de Malibú, ya quemó 335 km cuadrados y destruyó casi 200 viviendas. Obligó a evacuaciones en Thousand Oaks, el suburbio de Los Angeles donde un veterano de guerra de los Marines mató a 12 personas en un bar, el miércoles 7 de noviembre.
Hill Fire, el tercer incendio, está controlado en un 70% pero afecta al valle de Santa Rosa ubicado en el condado de Ventura, con eje en sitios como Hill Canyon Road. Se inició también cerca de Thousand Oaks, a unos 65 km de Los Angeles. Las llamas se extendieron por toda la costa y la Oficina del Sheriff del condado de Los Angeles, John Benedict, dijo que se encontraron dos cadáveres quemados dentro de un auto en el área de Malibú. Las llamas obligaron a cortar la ruta estatal 101 y se habilitaron refugios en localidades como Camarillo y Woodland Hills.
Los meteorólogos avisan que las peligrosas condiciones climáticas favorables a los incendios seguirán durante la semana entrante. “Habrá vientos cálidos soplando en el área de Los Angeles, esto viene mal, no hay más que malas noticias”, dijo Marc Chenard, del Servicio Meteorológico Nacional. Los bomberos se preparaban para luchar contra los “vientos de Santa Ana”, potentes ráfagas de aire muy seco que soplan desde el interior montañoso hacia la costa.
Malibú y la cercana localidad de Calabasas integran una zona residencial donde viven varias personalidades de Hollywood. Muchas de ellas tuvieron que evacuar sus hogares, entre ellas Kim Kardashian, Lady Gaga, Guillermo del Toro y Martin Sheen. El incendio destruyó los estudios donde se filma la serie de televisión Westworld y también amenaza las instalaciones de la Universidad Pepperdine, en Malibú, un centro educativo privado donde concurren más de 7.000 estudiantes.
Las declaraciones del presidente Donald Trump en Twitter, por la ac- tuación de los bomberos de Cal Fire, provocaron polémica entre las autoridades de California. En un primer mensaje, Trump dijo: “Nuestros corazones están con los que combaten los incendios, los evacuados y las familias de los que murieron”. Pero luego, en otro mensaje, Trump opinó que “no hay explicación razonable para estos masivos, mortales y costosos incendios en California, salvo porque es muy pobre el manejo fo- restal. Miles de millones de dólares se entregan cada año, se pierden muchas vidas, todo por el pésimo manejo de los bosques. Arréglenlo ahora, o no habrá más pagos del gobierno federal”.
Evan Westrub, vocero del gobernador californiano Jerry Brown, dijo que los comentarios de Trump eran “insustanciales y desinformados”. Agregó que “nuestro foco está puesto en los californianos que sufren estos incendios y en los bomberos y rescatistas que trabajan contra reloj para salvar vidas y propiedades”.
También algunas celebridades nativas de California criticaron al presidente, entre ellas la cantante Kate Perry, quien dijo que las palabras de Trump eran “una respuesta despiadada” frente a la catástrofe. El gobernador Jerry Brown dijo que pedirá al presidente Trump una declaración de “desastre mayor”, que facilitaría a las víctimas acceder a terapias psicológicas, viviendas, ayuda para el desempleo y asistencia legal.
De acuerdo con las estadísticas, el incendio Camp Fire es el más destructivo en la historia de California. Se inició al norte de Sacramento en el parque forestal Plumas, creció tan rápido que muchos habitantes tenían que abandonar sus autos y escapar a pie de pueblos como Paradise. Ubicado a 140 km de Sacramento, hoy Paradise está en ruinas y el aire huele a ácidos químicos. Un corresponsal de la BBC de Londres dijo que en Paradise la intensidad del fuego fue tan fuerte que las cenizas son irreconocibles. Es un paisaje lunar, donde se oyen las explosiones de árboles y torres de telégrafos que caen, mientras los rescatistas exploran las ruinas en busca de señales de vida. ■