En la Casa Rosada, nadie quiso hablar sobre la indagatoria a Franco Macri
En el Gobierno insisten en que no tienen comentarios para hacer tras la citación judicial al padre del presidente.
“Acá cero repercusión”, blanqueó un funcionario en privado pasado el me- diodía la decisión de Mauricio Macri y los principales integrantes del Gobierno sobre la citación a indagatoria de su padre Franco y su hermano Gianfranco en el marco de la causa conocida como los cuadernos de las coimas. El silencio fue la respuesta en las primeras horas, una vez conocido el llamado del juez federal Claudio Bonadio por presuntos pagos ilegales al Occovi durante el kirchnerismo para mantener concesiones de Autopistas del Sol, la empresa familiar del Presidente. “¿Qué se supone que debería decir?”, fue una pregunta retórica de funcionarios y allegados al jefe de Estado al esquivar un pronunciamiento sobre la derivación de la causa. En Parque Norte, encumbrados integrantes del macrismo que asistieron al Consejo Nacional del PRO también evitaron profundizar en la cuestión. “Me estoy enterando por ustedes, no tengo opinión”, dijo Horacio Rodríguez Larreta. “Son decisiones de la Justicia”, respondió Patricia Bullrich. Macri también había evitado hablar cuando su primo Angelo Calcaterra confesó ante Bonadio pagos para financiar las campañas de 2013 y 2015, aunque en esos días hizo alusión durante un acto: “Un Estado transparente que esté al servicio de las personas es algo fundamental para combatir y prevenir la corrupción”. En aquel momento el Gobierno acudía a las complicaciones judiciales de Calcaterra para para tomar distancia de la supuesta injerencia de la Rosada en la causa de los cuadernos, ante las denuncias de persecución que formulaban los ex funcionarios kirchneristas. “Lo que está pasando representa un cambio enor- me en la Argentina, empresarios cercanos al Presidente se presentan en la Justicia. No hay impunidad para nadie. Este es el acuerdo para fundar Cambiemos que hicimos Macri y yo”, expresaba Elisa Carri. En esa época, y también cuando Bonadio pidió el desafuero de Cristina, importantes integrantes del Gobierno con el objetivo de despegarse señalaron los vínculos de Miguel Pichetto y sectores del peronismo con el juez. De relación ambivalente con su padre, el jefe de Estado quedó involucrado en un escándalo por la condonación -luego frenada por el Gobierno- de una deuda con el Correo Argentino SA cuyo perjuicio al Estado hubiera implicado unos $70 mil millones. En ese caso el propio Presidente anunció que el expediente volvía “a fojas cero” para evitar el costo político que venía creciendo. “Sin comentarios para hacer”, fue otra de las frases para salir del paso. Clarín consultó a integrantes del Gabinete, que buscaron quitarle trascendencia a las citaciones de Bonadio. ■