La UIF apela la excarcelación del ex vicepresidente y solicita que vuelva a prisión
El organismo antilavado prepara un escrito basándose que ese tribunal ya había rechazado liberarlo.
La Unidad de Información Financiera (UIF), que dirige Mariano Federici, apelará en los próximos días la excarcelación concedida al ex vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, quien está condenado a 5 años y 10 meses de prisión por el escándalo de Ciccone.
Fuentes de la UIF adelantaron a Clarín que pedirá que el ex ministro de Economía vuelva a prisión hasta que la Corte Suprema confirme su condena y se manifestaron "escandalizados" por el cambio de criterio del Tribunal Oral Federal 4 (TOF 4), pasando aún por encima de una decisión de la Cámara de Casación. Seguramente, un mismo criterio adoptará la Oficina Anticorrupción que lidera Laura Alonso.
Este tribunal con el voto mayoritario de Néstor Costabel y Pablo Bertuzzi había dispuesto, hace cuatro meses atrás, el cumplimiento de la condena en forma expresa y ahora cuando Bertuzzi fue reemplazo por Adriana Palliotti se dio marcha atrás. Palliotti sumó su voto al de la jueza María López Íñiguez. Bertuzzi pasó recientemente a integrar la Cámara Federal porteña.
La UIF seguramente basará su apelación en el voto de Costabel que habla por sí mismo en el caso de una encarcelación que había sido ratificada por la sala IV de la Cámara de Casación Penal. Al revés de lo que pasó con los condenados por la Tragedia de Once o el cura Julio Grassi que permanecieron libres hasta la confirmación del máximo tribunal penal del país.
El 22 de agosto de 2018, Casación había declarado inadmisible el recurso de casación interpuesto por la defensa de Boudou con costas. Entonces, los abogados del ex vicepresidente presentaron un recurso extraordinario ante la Corte el cual también fue declarado inadmisible.
En la actualidad se tramita ante la Corte un recurso de queja. Entonces, para Costabel el nuevo pedido de excarcelación “no es más que una reiteración de aquella similar solicitud que fue denegada hace escasos cuatro meses por este Tribunal, por mayoría”.
“Por ende, las decisiones que ahora pretenden revisar los abogados defensores, por esta vía anómala, están amparadas por el principio de doble conforme, puesto que se agotó su vía de revisión ordinaria, y sólo podrían eventualmente revocarse de prosperar alguna de las quejas que actual- mente tramitan ante la Corte”, agregó Costabel. Para este juez “es muy claro que los riesgos objetivos de entorpecimiento de la investigación y elusión o fuga, que se ponderaron en el auto del 7 de agosto de 2018 para disponerse el encarcelamiento preventivo de Amado Boudou, se estimaron configurados sobre la base de pautas objetivas inherentes a los hechos perpetrados, a sus modalidades comisivas especiales y a su extremada gravedad”. Esas pautas “se basaron, por tanto, en episodios y extremos fácticos del pasado, que por ser tales pudieron ser reconstruidos históricamente por los acusadores en las imputaciones que consolidaron en el juicio, con relación a Amado Boudou, las que, a su vez, fueron convalidadas en el veredicto y la sentencia condenatoria dictados a su respecto”.
Además, “es incontrastable que el encierro preventivo de Amado Boudou se justificó desde el punto de vista de las garantías legales y constitucionales en juego, en que el pronunciamiento del veredicto condenatorio recaído a su respecto, puso gravemente en crisis su estado de inocencia, a través de un temperamento conclusivo de mérito –y con certeza apodíctica- sobre las imputaciones concretadas por los acusadores, que puso fin a un juicio oral y público durante el cual, como consecuencia del sistema acusatorio, se debatió en el juicio”. Finalmente, Costabel destacó la existencia de otras causas contra Boudou y “las condiciones relativas a su arraigo tampoco han variado hasta hoy. Y ciertamente, esos extremos conforman un férreo impedimento para disponer la excarcelación de Boudou”. ■
La UIF basará su pedido en el voto del juez del Tribunal Oral Federal 4 Néstor Costabel.