Trump festeja con pizza y hamburguesas
Gusto. Trump agasajó con este insólito menú a deportistas universitarios ante la falta de personal por el “shutdown”.
Por el cierre administrativo del gobierno, el presidente norteamericano agasajó en la Casa Blanca a una delegación de deportistas con el menú menos indicado para la ocasión. Lo pagó de su bolsillo e incluyó grandes porciones de papas fritas.
El cierre parcial de gobierno en Estados Unidos está derivando en algunas situaciones insólitas. Ayer, ante la falta de personal de catering en la Casa Blanca, el presidente estadounidense Donald Trump recurrió a la “comida chatarra” para agasajar a un equipo de fútbol estadounidense universitario. Es más, pagó de su bolsillo la enorme cantidad de hamburguesas, papas fritas y pizzas que pidió la escuadra del mandatario.
“Pedimos comida rápida estadounidense y soy yo quien paga. Es debido al cierre, como saben. Muchas hamburguesas, pizzas, creo que preferían eso a todo lo que podríamos haberles ofrecido”, justificó el presidente. La comida provino de locales de McDonald’s, Wendy’s y Burger King’s, entre otros.
Según Trump, no tuvo alternativa ante la crisis de personal que trajo el cierre de gobierno. “Tenía que decidir. ¿No les damos comida porque tenemos un cierre, o les damos unas ensaladitas que iban a preparar la primera dama con ayuda de la segunda dama? Entonces yo dije: ‘ustedes no son de los que comen ensaladas...salgo y mando pedir unas mil hamburguesas, Big Macs’”, argumentó.
Algunos usuarios de Twitter criticaron al presidente por servir esa clase de comida a deportistas universita- rios, cuya dieta es controlada estrictamente por nutricionistas. Otros, en tanto, tuitearon que el menú era más adecuado para estudiantes universitarios.
Trump se mofó del debate resaltando que la comida desapareció rápidamente de las mesas. “Excelente estar con los campeones nacionales Clemson Tigers anoche en la Casa Blanca. Debido al Cierre les serví enormes cantidades de Comida Rá- pida. Más de 1000 hamburguesas desaparecieron en una hora. ¡Grandes tipos y de buen diente!”, tuiteó.
Las fotos y videos del equipo de prensa mostraron montañas de hamburguesas sobre una mesa general. Las papas fritas fueron servidas en tazas decoradas con el escudo presidencial. El menú se completó con pizzas de distintos gustos. Los condimentos extras, que los estadounidenses suelen utilizar abundantemente, fueron ofrecidos en tazones de plata. Las imágenes mostraron a varios jóvenes comer una gran cantidad de hamburguesas.
La vocera presidencial, Sarah Huckabee Sanders, dijo que buena parte del personal de la residencia presidencial goza de vacaciones forzadas debido al cierre de la administración, “por eso el presidente paga personalmente por el evento en que se sirven las comidas rápidas preferidas por todos”. La Casa Blanca no divulgó el costo.
El famoso “shutdown”, cierre de la administración estatal, se debe a la falta de presupuesto gubernamental por la negativa de la oposición demócrata en el Congreso a aprobar el proyecto enviado por la Casa Blanca. Sucede que Trump quiere incluir en la iniciativa la financiación del muro en la frontera con México, para cortar así la inmigración ilegal. Los demócratas rechazan tajantemente esa medida.
La paralización parcial de la administración pública lleva ya 24 días y constituye el cierre más largo de la historia de Estados Unidos. Trump se niega a quitar del proyecto la financiación del muro, complicando un posible acuerdo. Para los analistas, el trasfondo de esa decisión es desviar la atención de un tema más espinoso para el mandatario: la asunción por parte de los demócratas del control de la Cámara de Representantes, en virtud del triunfo que obtuvieron en las elecciones legislativas de noviembre pasado. ■
“Más de 1.000 hamburguesas desaparecieron en una hora”, tuiteó Trump.