Hay otras prioridades antes de repavimentar la autopista
No salgo de mi asombro al ver equipos trabajando en la repavimentación de la Autopista 9 de Julio Sur (Presidente Arturo Frondizi). No hace mucho la demarcaron en toda su traza, agregándole las tachas reflectantes. El estado de la autopista era y es extraordinario, salvo en las juntas de dilatación.
Emprender semejante gasto inútilmente es tomar por analfabetos a los pobres ciudadanos de Buenos Aires. Esto es dilapidar los aportes de los vecinos en un escenario que la Ciudad y el país no puede ni debe tolerar. ¿Los hospitales y centros de salud no requieren inversiones? Ya apreciar los robos que hacen con las veredas construyéndolas una y otra vez con sistemas de baldosas que no existen en casi ninguna ciudad importante del mundo. Baldosas que por su espesor debieran tener una vida útil de décadas, pero como están “pegadas” con la mayor parte de arena, al poco tiempo por filtración de agua están todas sueltas y rotas. ¿Los trabajos no tienen controles y garantía? ¿Es el ciudadano común el único que advierte los problemas? ¿Los funcionarios públicos no caminan y van siempre en auto que no ven nunca nada? Parece que ciertos dirigentes no viven ni sufren lo que el común de los mortales y siguen creyendo que el país está bárbaro y que pueden disponer de los fondos públicos como se les da en gana. Soy miembro de la Fundación Grameen Argentina (microcréditos para los pobres más pobres) y si supieran el esfuerzo que se requiere para juntar unos escasos fondos para construir una mejor calidad de vida …
Horacio Lomoro h.lomoro@grameenarg.org.ar