Murió una nena y su familia acusa al hospital de mala praxis
Luna Desiree murió el domingo. Tenía cinco años. Su mamá, Milena Anabel López, de 23 años, acusa de mala praxis al hospital donde fue tratada y a los médicos que la atendieron. En la causa dice que llevó a su hija tres veces para que la vieran por una fiebre persistente. Quienes la asistieron a Luna recomendaron "tomar ibuprofeno y hacer reposo". La nena falleció en la cuarta vez que concurrió a la misma institución.
Pasó en la localidad bonaerense de Capilla del Señor. Los primeros síntomas aparecieron el viernes. La nena se quejaba de dolor en las piernas y tenía fiebre. La mamá la llevó al Hospital Municipal San José. El médico le diagnosticó "sinovitis viral", le dio ibuprofeno y le hizo radiografías. También la vio un traumatólogo, que le indicó reposo. Y le dieron el alta.
La sinovitis es una inflamación o irritación de la membrana sinovial. Esta membrana es la que genera un líquido cuya función es reducir la fricción entre los cartílagos y otros tejidos, para lubricar las articulaciones en los movimientos.
El tratamiento no sirvió. La nena no se recuperaba y levantaba cada vez más temperatura. El sábado, Milena volvió al hospital y esta vez la atendió otro médico, que le hizo pruebas de sangre y orina. No encontró nada distinto y repitió el diagnóstico. "Es todo normal", le dijo el médico.
Pero la salud de Luna seguía empeorando. Entonces, la mamá volvió al hospital y esta tercera vez le exigió a los médicos que la internaran. El médico accedió a colocarle un suero con un calmante. Le adelantó que le daría el alta. Sin embargo, al notar que la pierna de la paciente comenzaba a estar morada, le advirtió, si vomitaba, la llevara de nuevo porque "podía estar incubando algo".
Al ver que su hija no mejoraba, Milena la llevó el domingo a la madrugada corriendo al hospital, donde vieron que tenía las extremidades frías y le costaba respirar.
En la causa se dice que el médico, al verla así, consultó con colegas y decidió intervenir colocándole un suero a la nena. "Mamá", llegó a escucharla decir, antes de que la apartaran para comenzar con la reanimación y de que le informaran poco después que su hija había fallecido.
"Fue mala praxis. Le habían diagnosticado sinovitis viral y era bacteriana", comentó a Clarín Juan Pablo Fernández, abogado de la familia. Al cuerpo lo llevaron a Campana para hacerle la autopsia y todavía no hay ningún imputado por el caso. ■