Cromañón y Olavarría, dos tragedias con caminos judiciales diferentes
Expertos explican por qué se condenó a los músicos de Callejeros y el ex líder ricotero no quedó involucrado.
Al elevar a juicio la causa que investiga las muertes y lesiones ocurridas en el recital del Indio Solari en Olavarría en 2017, el juez de Garantías Carlos Villamarín dejó a los productores y al orga- nizador del show imputados por homicidio culposo y desligó a Solari de toda responsabilidad. Muchos cuestionan esta decisión y comparan el caso con la tragedia de Cromañón, ocurrida en 2004, que siguió un camino judicial diferente.
Entonces, 194 personas habían fallecido tras el incendio del local -atestado y sin salidas de emergencias-, durante un recital de Callejeros. Por este hecho, recibieron condenas la banda, el manager, el empresario Omar Chabán, su mano derecha y distintos funcionarios públicos.
Los músicos fueron declarados culpables de "estrago culposo seguido de muerte y participación necesaria con cohecho activo", por lo cual recibieron entre 5 y 7 años de prisión. Este año, el líder del grupo, Patricio Fontanet, salió en libertad.
Entonces, ¿por qué los miembros Callejeros debieron cumplir una pena en la cárcel y el Indio Solari fue desligado? Abogados penalistas explicaron a Clarín las diferencias.
"En primer lugar, hay que decir que Solari no fue imputado, sino que lo citaron sólo como testigo. La clave para desvincular a Solari fue el contrato que presentó su representante, el cual dejaba fuera al artista de toda la organización", puntualiza Christian Poletti.
El letrado, intervino como querellante en la causa de Callejeros, aclara: "Fontanet y su banda estaban involucrados en la convocatoria y la organización, eso los hizo ser considerados responsables desde del primer momento y es la diferencia con lo de Olavarría".
"La imputación inicial a los productores del concierto del Indio fue la de 'estrago doloso con dolo eventual agravado', pero el juez le cambió la calificación a 'homicidio culposo'. Esto se debe a que el 'estrago', por definición, es un hecho que involucra una destrucción masiva de grandes proporciones, como fue la de Cromañón. Además, implica un delito contra la seguridad pública y no solo contra las personas", añade Poletti.
Su colega, Eduardo Gerome, señala que, además, en el caso de Callejeros, había existido una "prosecución del espectáculo pese a que se sabía que había bengalas prendidas en el lugar, con el peligro que estas generaban".
Nilda Gómez es abogada y mamá de Mariano, una de las víctimas de aquella triste jornada de 2004. Desde entonces, preside Familias por la Vida, que nuclea a familiares de víctimas caídas en recitales, como el papá de Ariana Lizarraga (a quien se le cayó un entrepiso durante un concierto de Ráfaga) o la mamá de Miguel Ramírez (que recibió el impacto fatal de una vengala en un show de La Renga). Juntos, pelean para que todos los responsables de las desgracias sean enjuiciados.
"A diferencia de Callejeros, que era una banda que recién se iniciaba, el Indio tenía una malla de protección que son las productoras. Él cobraba su cachet y dejaba que otro organice el evento", afirma Gómez. La mujer mantiene contacto permanente con la esposa de Juan Bulacio, uno de los dos jóvenes que murió en 2017 en Olavarría.
Ahora bien, ¿es seguro que el Indio Solari no deberá responder a la Justicia? El profesor titular de cátedra de Derecho Procesal Penal Alejandro Segarra plantea que no está descartado que pueda ser imputado eventualmente, pero que ello "debería surgir de indicios del propios del juicio, por ejemplo, la declaración de los testigos, como le pasó a De Vido durante el primer juicio por la Tragedia de Once". En este sentido, aclara que "en derecho penal, las suposiciones no hacen a la culpa", por lo cual las conductas atribuibles a una persona deben ser probadas de manera concreta.
"Después de Cromañón, no logramos justicia completa -ya que la banda terminó en estado "culposo", como si todo hubiera sido un accidente-, pero conseguimos que desvincularan al jefe de Gobierno y muchos culpables terminaron en la cárcel. Ahora, la familia de Bulacio tiene la esperanza de que los responsables municipales de Olavarría también sean llevados al banquillo. Eso sería lo único bueno en todo esto. Es por las víctimas que seguimos luchando. Lloramos y seguimos", concluye Gómez. ■