Justin Bieber sufre depresión
Según publicó la revista “People”, el cantante de 24 años “parece abatido y cansado. Está luchando”.
Hace unos días, Justin Bieber fue noticia por una confesión: reveló por qué no había tenido sexo con su esposa, Hailey Baldwin, antes de casarse. El flamante matrimonio posó para la tapa de la revista Vogue, y él dio detalles del pasado de excesos y de su conversión religiosa.
Pero la noticia por estas horas es la que preocupa a sus fans: Justin atraviesa un momento difícil debido a la depresión que arrastra a causa de la fama que supo conseguir.
A los 24 años, su entorno dice que encontró en su esposa Hailey un gran refugio, pero no es suficiente, por lo que está recibiendo ayuda profesional, según confirma la revista People.
“Justin parece abatido y cansado. Está luchando. Tiene muy buena ayuda a su alrededor y está recibiendo tratamiento”, se lee en la publicación, que cita a una fuente cercana al cantante.
“Comenzó siendo un dulce adolescente canadiense. Un gran niño, muy educado y amable con todos. Tener esa gran cantidad de fama lo cambió por completo. Tenía acceso a todo en todo momento y estaba rodeado de personas que nunca le decían que no a nada”, amplía la misma fuente.
En algunos tramos de la entrevista para la revista Vogue, que otorgó recientemente, Bieber contó con detalles sobre cómo afectó a su salud mental la fama infantil. “Comencé realmente sintiéndome demasiado. Pensaba: ‘La gente me ama, yo soy el amo’. Me volví muy arrogante”.
“Me encontré haciendo cosas de las que me avergüenzo. Era muy promiscuo y esas cosas. Y creo que usé Xanax (un medicamento para tratar la ansiedad)”, admitió sin vergüenza.
En otras ocasiones, Justin se sometió a la ayuda de un grupo. Así lo explicó: “Te sentás en una colchoneta, ponés una almohada y le das una paliza a tu pasado. Superé el hecho de que mi madre estuvo deprimida gran parte de mi vida y mi padre tiene problemas de ira. Cosas que pasaron y con las que estoy enfadado”.
En su camino hacia la recuperación, el muchacho se inclinó a la reli-
gión (Hillsong, una iglesia pentecostal fundada en Australia en 1983). “Siempre quise la seguridad: cuando era niño mi padre se iba a veces. Con el estilo de vida que vivo, todo es muy incierto. Necesito algo que sea seguro. Soy emocionalmente inestable. Lucho por encontrar la paz. Siento que me importa mucho y quiero que la gente me quiera”, se animó a confesar. ■