Piden la detención del ex suegro del visitador médico asesinado en San Fernando
Denuncian que tuvo vinculación con el homicidio. Buscan al venezolano señalado como autor material.
Mientras continúa la búsqueda de Roswil Belisario, el venezolano acusado de matar a Braian Fillip, los familiares del visitador médico hicieron ayer una marcha frente a los Tribunales de San Isidro. Allí reclamaron por la detención del ex suegro de la víctima, a quien señalan como instigador del homicidio, y denunciaron que el prófugo siguió trabajando para Uber mientras era buscado y así se mantenía en la clandestinidad.
Andrés Rabinovich, uno de los abogados de la familia Fillip, dijo ayer que, mientras estaba prófugo, el venezolano “siguió manteniéndose solo, porque seguía trabajando de Uber en provincia”. Más precisamente por la zona de Escobar y Campana.
Los investigadores del crimen de Fillip tienen la misma sospecha que la familia del visitador médico de 28 años ejecutado de dos tiros en la cabeza en San Fernando. Aunque, según confiaron las fuentes a Clarín, recién van a poder corroborar esa hipótesis cuando puedan acceder a los celulares que Belisario dejó en el Fiat Siena antes de huir de la Policía por unos pajonales de Escobar.
“La sospecha es que Belisario se movía por Escobar y Campana escondido detrás de una identidad falsa que usaba para poder trabajar para la aplicación”, agregaron fuentes de la investigación consultadas.
También dijeron que pidieron la ayuda de Uber pero apenas les respondieron que “un estudio de abogados se iba a poner en contacto con ellos”. Alegaron que eso jamás sucedió y que para solicitar los informes de la geolocalización del auto de Belisario y enviar un oficio usaron “la apli- cación de un policía que trabaja para Uber”. Ante la consulta de Clarín, desdesde la empresa señalaron que “el equipo de Uber especializado en seguridad se encuentra colaborando con la autoridad en este caso”.
Belisario fue localizado el martes por la Policía en Escobar a bordo del Fiat Siena. Al darse cuenta que lo seguía, huyó. En la fuga chocó tres autos y dejó el coche abandonado antes de salir corriendo, cruzar la Panamericana y meterse en un pajonal.
Según informaron fuentes del caso a Télam, después de escapar Belisario tomó un remís en la localidad de Garín y el chofer de ese coche declaró que no se dio cuenta quién era pasajero y que le notó rasguños en la cara. Luego, se subió a otro remís has- ta el Shopping Soleil de Boulogne, donde le perdieron el rastro.
Para los investigadores, Belisario cometió el asesinato tras descubrir que Sofía, una joven con la que había mantenido una fugaz relación, estaba nuevamente en pareja con el visitador médico, padre de su hija de tres años. En su plan habría contado con la ayuda de un amigo, detenido la semana pasada.
Sin embargo, para la familia la investigación no termina en los dos detenidos. Además de reclamar por la detención del prófugo, la familia Fillip apuntó ayer contra el ex suegro de la víctima, dueño del galpón en el que los investigadores encontraron el auto utilizado en el crimen. Ese espacio era usado por el venezolano co- mo taller mecánico.
“Actuó directa o indirectamente para inducir al venezolano a cometer el crimen”, señaló Rabinovich, en referencia al padre de la joven con la que el visitador médico tenía una hija y con quien había vuelto a mantener una relación en los últimos meses. “Hay un montón de pruebas que lo incriminan. Queremos que la Justicia nos escuche”, indicó Matías, hermano de la víctima.
Claudio, el papá de Braian, recordó parte de la relación conflictiva con el ex suegro: “Mi hijo dejó embarazada a su hija y él se oponía y quería que aborte porque ella estaba estudiando para azafata y no quería que le corte la carrera. Pero mi hijo se opuso y finalmente tuvieron a su hija”. ■