Las melodías de Disney se escucharán en el Colón
Con seis funciones casi agotadas, el espectáculo “Disney en concierto” se perfila como un hito en el Gran Coliseo.
Los grandes clásicos con ballet estable, coro y 90 músicos.
macgomez@agea.com.ar
Volar en una alfombra mágica como Aladdin, tener la trenza más larga del mundo como Rapunzel, o navegar los mares como Moana, ya no va a ser sólo un sueño.
La magia de las historias de Disney que atravesaron las infancias de más de cuatro generaciones cobrará vida desde hoy y todo el fin de semana, cuando se levante el telón del Teatro Colón para presentar Disney en concierto, Sinfonía de películas.
Se trata de una experiencia que tiene como objetivo sumergir a los espectadores en un viaje musical, que los llevará a recorrer las canciones de las películas icónicas de Disney, en el marco de una sala de acústica aclamada a nivel internacional, y de la mano de la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires y de su director, el maestro Enrique Arturo Diemecke.
Tal como describe Peter Macfarlane, director de escena del show, el espectáculo logrará convocar a públicos de todas las edades, y generará un encuentro entre abuelos, hijos y nietos, que acudirán al teatro con el mismo entusiasmo y emoción.
“Siempre digo que cualquier persona que tenga menos de 100 años ha sido atravesada, de algún modo, por Disney. En mi caso, yo estoy tocada por estas historias como niña, como madre y como abuela. Estamos ansiosos por ver la reacción del público, y sobre todo, muy conformes con el resultado, porque a ambas instituciones nos rige la excelencia y los mismos valores de calidad de trabajo”, agrega María Victo- ria Alcaraz, Directora General del Teatro Colón.
La propuesta fue organizada con la misma profesionalidad y rigurosidad que cualquier otra ópera presentada en esta institución. Además de la orquesta, habrá un despliegue gigantesco de bailarines, cantantes y actores, llegando a haber casi 200 personas en escena en algunos de los cuadros. Todos ellos estarán acompañados por una pantalla gigante de fondo, donde se verán fragmentos de las películas que se estén interpretando.
Planteado como un casamiento perfecto entre el mundo de Walt Disney y el del emblemático teatro porteño, participarán miembros del Coro de Niños y bailarines del Ballet Estable y del Instituto Superior de Arte del Teatro Colón. Los vestuarios y la puesta en escena mezclan elementos importados del exterior, y otros propios de la sastrería del teatro.
“Nos encanta la idea de que los niños actúen para niños, para que los que estén en la platea se inspiren por lo que ven en el escenario y digan ‘yo quiero ser como ellos’”, cuenta Mac-
farlane, refiriéndose a la versión de El Cascanueces que será realizada por los alumnos del Instituto Superior de Arte.
Por otro lado, no van a faltar los personajes clásicos que supieron enamorar a grandes y chicos: Mickey, Minnie, Pluto, Donald y Goofy.
Sin hablar de cifras, Alcaraz explica: “Es una coproducción artística y comercial entre Disney y el Colón. En resumen, los gastos van 50 y 50, y por otro lado, lo recaudado se divide de la misma manera”.
El espectáculo, que se desarrollará en dos actos de una hora cada uno, hará un repaso por las películas más icónicas de Disney, desde las más antiguas hasta las que estrenaron el año pasado.
De esta forma, van a estar presentes los personajes favoritos de los millennials, como Elsa y Anna de Frozen, y también los clásicos de Fantasía, como El aprendiz de brujo.
Sonarán Nuestro huésped sea usted, de La Bella y la Bestia; Un mundo ideal, de Aladdin; En mi corazón vivirás, de Tarzán; El ciclo sin fin, de El Rey León, y hasta el vals de La Bella durmiente, de Tchaikovksy.
Según explicó el director de escena, las canciones fueron elegidas teniendo en cuenta el oído musical del público, incluyendo los temas que todos conocen, para emocionarlos y lograr que tarareen al ritmo de la música.
“Cuando me preguntan cuál es mi canción favorita, nunca me puedo decidir, me gustan todas. Trabajar en conjunto con Disney es un reto maravilloso, se vienen a la mente muchas cosas que uno siempre ha soñado hacer. Nuestra misión es acercarnos a la juventud, para desarrollar el oído de los que serán el público del futuro”, cuenta Diemecke, que además de estar a cargo de la orquesta, es el director general artístico y de producción, y está convencido de que este show será un hito a nivel mundial.
Martín Iraola, Vicepresidente Senior de The Walt Disney Studios Latin America, explica la importancia de estas presentaciones para el mercado local: “Siempre tratamos de ponerle mucho énfasis al entretenimiento en vivo, porque nos parece que es la oportunidad para que el público se sumerja realmente en nuestro mundo. A cualquiera que le preguntes qué experiencia Disney le gustaría vivir, seguramente te diga que quiere ir a los parques. Como en Latinoamérica no tenemos esa posibilidad, lo más cerca de ese contacto directo es la experiencia en vivo”, explica.
“Los que vengan a ver este espectáculo van a poder conocer a Mickey y a sus amigos con la magia que los caracteriza. No hay sensación más linda que ver la cara de los niños cuando aparece su personaje favorito caminando por el pasillo del teatro”, adelanta.
La clave de la presentación es la autenticidad y la buena energía que se contagia desde el escenario. “El elenco se está matando de risa en los ensayos. Eso es lo más gratificante, saber que nos estamos divirtiendo tanto como el público que nos va a venir a ver”, cuenta Macfarlane.
Consultado por las razones que mueven a los espectadores a seguir eligiendo Disney, el director de escena no duda: “Es que tiene alma. He visto abuelas acercarse a Goofy y convertirse en nenas, como si el tiempo no hubiera pasado. Eso va a pasarle al público que venga a ver este espectáculo. Se van a reír, se van a sorprender, y también se van a emocionar. Pero lo más importante que se tienen que llevar es el mensaje final, que da forma a todo el show y se pone en palabras de Mickey: ‘Nunca dejen de soñar’”. ■