Clarín

Toni Harris, la mujer que quiere ser la primera en jugar en la NFL

La estadounid­ense es la primera jugadora de campo becada por una universida­d para competir en su equipo.

- Juan Martín Prezzoli jprezzoli@clarin.com

Durante el Super Bowl de enero, medio minuto de publicidad televisiva costó alrededor de 5 millones y medio de dólares. El spot de Toyota comenzaba con una voz en off que afirmaba: “Dijeron que ella era demasiado pequeña, débil y lenta. Hicieron demasiadas suposicion­es sobre ella”. La cá- mara se quedaba con la imagen de una joven, que decía: “Pero yo nunca fui muy fanática de las suposicion­es”.

Esa joven, que hace apenas cuatro años superó un cáncer de ovario y perdió la mitad de su peso, se transformó en la primera jugadora de campo en la historia del fútbol americano universita­rio en recibir una beca deportiva. Antoinette “Toni” Harris, quien jugó con y contra hombres en la secundaria, hará lo propio en el siguiente nivel. Y sueña con ser la primera mujer en llegar a la NFL.

Nacida en Detroit, a los 4 años ingresó en un orfanato y permaneció hasta los 9, cuando vio a su primo jugar este particular deporte. Mientras se destacaba en el atletismo, el interés de Harris por el fútbol americano cre- ció hasta probar suerte.

“Fui echada del equipo cuando era niña, pero insistí en volver, me hice un hueco y luché”, reveló Harris en varias entrevista­s. “Yo no quise ser distinta; lo soy por mi género. Me enamoré de la energía del fútbol. Tuve un entrenador que me dijo que jamás llegaría al siguiente nivel porque soy más lenta y pequeña que los hombres, y desde entonces me propuse que nadie decidiría por mí qué debía hacer con mi vida”, agregó.

Tras terminar su secundario en Redford, Michigan, se inscribió en el East Los Angeles College, una institució­n que acoge deportista­s que no recibieron una beca, pero que podrían hacerlo en el futuro.

Jugó dos temporadas en la posi- ción de safety, que patrulla el fondo de la cancha intercepta­ndo pases rivales y que requiere de una gran velocidad, visión de juego y capacidad de tackle. Harris no se amilanó ante los hombres a tacklear. Al final, recibió nada menos que seis propuestas de becas y se decantó por la Universida­d Metodista Central de Fayette.

Harris no será la primera mujer en jugar fútbol americano a nivel universita­rio. Varias pateadoras ya habían llegado a ese nivel. De hecho, tampoco es la primera becada, pues Becca Longo había recibido en 2017 una beca para ser la pateadora de la Universida­d Estatal de Adams.

Lo novedoso de su caso es que es la primera jugadora de campo a nivel universita­rio. O sea, que tendrá con- tacto físico con hombres en este deporte áspero y proclive a choques de alto impacto. Más aún, al ser una jugadora del equipo defensivo, una de sus principale­s tareas será tacklear.

“Yo jamás le hice las cosas sencillas. Lo que la hizo crecer fue su capacidad de superación”, afirmó su ex entrenador en ELAC, Bobby Godinez. ¿Cómo es un día en un vestuario repleto de hombres? “Estoy hace tanto en este deporte que ya es normal para mí- replica Harris-. Hay hombres que me apoyan y otros a quienes los sorprende. En la secundaria fue más raro. Yo los hago acostumbra­rse. Fuera de la cancha, soy una mujer, pero adentro soy una jugadora de fútbol”.

Por si quedan dudas de que su género no representa­rá un problema, David Callaway, su nuevo entrenador en UMC, ya les lanzó una seria advertenci­a a sus jugadores: “Si alguno no se siente cómodo, hay muchísimas otras escuelas donde puede ir. Quiero gente apasionada en mi equipo y Antoinette definitiva­mente lo es".

Harris llegó a pensar que su carrera había llegado a su fin tras su operación de ovario. No fue así y hoy se anima a soñar con la NFL. “Si había superado todo en mi vida, eso también podía hacerlo. Demostré tener potencial para jugar a nivel universita­rio y ahora demostraré que puedo ir a la NFL”, dijo.

Además de ser una competidor­a incansable, Harris es una fuerte activista por los derechos de la mujer. Y espera que su historia abra camino. “Quiero que las chicas entiendan que nunca hay que dejar de empujar, que no hay que darse por vencidas. Ellos no quieren mujeres en este deporte y por eso para tener una oportunida­d debes demostrar merecerlo”, expresó Toni en una impactante entrevista con Today.com.

“Quiero demostrar que las mujeres tenemos calidad, que podemos hacer, lograr y enorgullec­er. Mi objetivo es ser la primera mujer en la NFL para que detrás mío más chicas puedan andar su propio futuro y dejar legados. Creo que el futuro es feminista”, sentenció orgullosa. ■

“De niña me echaron de un equipo, pero insistí, me hice un hueco y luché”, comenta Toni.

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Ella y ellos. Harris juega en una posición en la que debe intercepta­r pases rivales y requiere tener capacidad para tacklear a los hombres.

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