Por la devaluación creció el turismo y quieren que llegue a más barrios
En 2018, los extranjeros gastaron un 30% más. Buscan que cada zona de la Ciudad tenga un circuito para atraerlos.
El año pasado llegaron a la Ciudad de Buenos Aires 2,7 millones de turistas internacionales, superando en 200 mil la cifra del 2017. Y el consumo de los visitantes en bienes y servicios subió un 30%. La mayoría vino de países sudamericanos, principalmente Brasil. Debido al tipo de cam- bio, la capital argentina se convirtió en un destino más accesible. Por eso, el Gobierno porteño lanzó un plan para que cada barrio promueva su propio circuito de atracciones. Brindarán cursos de capacitación a vecinos y comerciantes, y prometen mejorar el servicio del bus turístico.
Para los extranjeros que llegan de visita a Buenos Aires, el contexto no puede ser más prometedor: un dólar que siempre empuja para arriba, una ciudad con alternativas turísticas para cada estación del año, una amplia carta gastronómica y una oferta cultural como en las capitales más cosmopolitas del planeta.
Por todo eso es que el consumo de los visitantes extranjeros en bienes y servicios en 2018 aumentó un 30% con respecto a 2017. El año pasado llegaron 2,7 millones de turistas del exterior, contra los 2,55 millones de 2017, y dejaron US$ 2.000 millones. Mientras tanto, el turismo nacional dejó otros US$ 1.000 millones. Las cifras son aportadas por el Ente de Turismo porteño, desde donde señalan que sólo en enero de este año el turismo internacional subió un 20% con respecto al mismo mes de 2018.
Según indican desde el organismo, Brasil, Uruguay, Estados Unidos, Chile, Colombia, España, Perú e Italia son los mayores proveedores de turistas para la Ciudad, cada uno de los cuales gastó en promedio US$ 900 en cada viaje. En el resto de Sudamérica, en cambio, el gasto promedio asciende a US$ 798.
Buenos Aires también es una de las metrópolis donde cada vez más turistas eligen moverse por fuera de los circuitos tradicionales. “El nuevo viajero busca un contacto con la cultura local, viajar como si fuera un residente. Eso abre una enorme oportunidad a todos los barrios porteños”, asegura Fernando Straface, secretario general y de Relaciones Internacionales de la Ciudad.
Por eso, el Gobierno porteño impulsa un plan para promover la llegada de turistas a más zonas de la Ciudad. El programa de “Derrame del turismo a más barrios” apunta a fomentar el desarrollo de recorridos en cada uno de los 48 barrios, que incluyen cerca de 500 atracciones.
A modo de soporte, se creará un mapa interactivo con los puntos de interés de cada zona, que contará con material audiovisual para descargar. “Estará alojado en nuestra web (tu-
rismo.buenosaires.gob.ar/es) y será administrado por el equipo del Ente de Turismo, que también tiene a su cargo otras plataformas para el visi- tante, como BA Planner, BA Tours y la app Travel Buenos Aires”, detallan desde el Gobierno porteño.
En esta cruzada, el aporte vecinal será el ingrediente que haga la diferencia. “El vecino muchas veces no sabe lo importante que es el turismo, por eso queremos que conozca lo que representa, el impacto, las fuentes de empleo. Y todo en un espacio de concientización con otros vecinos y otros actores, como museos, restaurantes y hoteles. De esa manera podrán colaborar en el armado de los circuitos turísticos para su barrio”, mencionan desde el Ente.
De esto son buenos ejemplos los recorridos que se ofrecen en el programa Buenos Aires Alternativo, con opciones como un paseo por Chacarita, conocer la feria y los murales de Coghlan o tomar algo en un “ambiente indie” por Villa Crespo o Almagro.
También se anunciaron mejoras en el Bus Turístico. Incluyen un nuevo equipamiento con wi-fi y estaciones de carga para celular, cámaras de videovigilancia y un sistema de control de la emisión de tickets y de boletos con código QR, que sumará promociones y descuentos. Además, se trabaja en una nueva concesión del servicio, que estará a cargo de dos operadores distintos para “promover la competencia”.
De acuerdo a los números presentados por el Ente, el crecimiento sostenido del turismo durante los últimos dos años tuvo su rebote en el sector hotelero. Según las cifras oficiales, en 2018 la Ciudad registró la tasa más alta de ocupación hotelera desde 2011, con un 59,4%.
En la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés (AHRCC) son más cautos. Su presidenta, Gabriela Akrabian, también titular de la Cámara de Hoteles, explica: “En el relevamiento entre los hoteles que forman parte de nuestra asociación notamos un crecimiento en la ocupación, pero no tan alto como el que menciona la Ciudad. Después de cada devaluación se ha ido incrementado el turismo. Además, en 2018 los Juegos Olímpicos de la Juventud y el G20 provocaron una explosión”.
Este año, se promulgó una ley de incentivos fiscales para renovar la plaza hotelera de Buenos Aires. “El régimen es clave, porque una parte de la infraestructura hotelera de la Ciudad tiene más de 30 años. La ley permitirá que se remodelen más de 70 hoteles y la generación de unos 2.000 empleos directos”, sostuvo Gonzalo Robredo, presidente del Ente de Turismo. En tanto, el ministro de Economía, Martín Mura, agregó que “con estas medidas, como la ley de Incentivos Hoteleros se incrementarán las inversiones en un sector estratégico”.
En esa dirección, el Gobierno presentó la línea de préstamos “Ciudad Turismo”, que brinda hasta $ 10 millones para la construcción, remodelación y equipamiento de hoteles. “Los hoteles que tenían intenciones de remodelar debían invertir una suma muy alta -dice Akrabian-. Sin créditos, se hacía imposible”. ■