Putin visitó al Papa y pidió que cesen las sanciones internacionales contra Rusia
Son las impuestas por la anexión de Crimea. El líder ruso también habló sobre Venezuela y la Iglesia ortodoxa.
Presente y sonriente con una hora de retraso, como la ocasión anterior hace cuatro años cuando visitó el Vaticano, el presidente ruso Vladimir Putin dialogó ayer durante sesenta minutos con el Papa Francisco y dos temas fueron principales: el complejo conflicto en Ucrania y la protección de los cristianos en el Medio Oriente, especialmente en Siria, donde los conflictos armados prosiguen.
La tercera cuestión fue la crisis en Venezuela, de la que hablaron también en un breve encuentro después de la audiencia pontificia, Putin y el secretario de Estado Pietro Parolin. El líder del Kremlin también reclamó ante el gobierno de Roma que las nuevas autoridades de la Unión Europea revisen las sanciones contra su país.
Hoy viernes Francisco recibirá en el Vaticano al obispo mayor de la Iglesia greco-católica ucraniana, Sviatoslav Shevchuk, y todo su sínodo permanente, convocados por el pontífice argentino para dialogar acerca de la guerra en Ucrania, que en cinco años de conflicto bélico ha costado la vida a 13 mil personas. La crisis que ha llevado a Estados Unidos y Europa a aplicar severas sanciones económicas a Rusia es la anexión de la península de Crimea.
A una situación ya difícil, se agregó a principios de este año la ruptura entre la Iglesia Ortodoxa Rusa y su sector ucraniano, que declaró su independencia bajo la inspiración de Bartolomeo, el patriarca ecuménico de Constantinopla.
La Iglesia Ortodoxa Rusa acusa de parcialidad en favor de Bartolomeo y sus decisiones al Papa de Roma. Una situación compleja que ha emponzoñado el camino a Moscú de Francisco, en una histórica reconciliación de los grupos cristianos que rompieron en 1054 en un cisma que continúa hasta hoy. Por eso no hubo invitación a visitar Moscú al Papa por parte del presidente ruso.
El Papa espera de Putin una posición en favor del alivio de las tensiones en una cuestión como la de Ucrania, que es primordial para la Iglesia Católica.
Hace poco visitó Rusia el secretario de Estado, cardenal Pietro Parolin, que dialogó con Putin tras la audiencia del Papa Francisco con el presidente ruso.
Según Parolín, Rusia puede jugar “un gran papel” en favor de la paz y el diálogo en Venezuela. Los rusos esperan que el Papa ejercite su influencia en favor de una salida negociada y pacífica en el país sudamericana.
El Papa y Putin, que demuestran abiertas simpatías mutuas, se dieron un fuerte apretón de manos al llegar el líder ruso y se despidieron con otro apretón de manos al final tras intercambiar regalos como es de estilo en estas audiencias de máximo nivel. ■