México: piden el arresto del ex director de Pemex
La orden emitida por el juez incluye también a su esposa, hermana y madre. Era cercano a Peña Nieto.
La Justicia mexicana ordenó la detención del ex director general de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya, así como la de su esposa, su hermana y su madre, todos vinculados en la investigación sobre sobornos pagados por el gigante brasileño Odebrecht.
Lozoya, quien dirigió la petrolera mexicana entre 2012 y 2016, fue uno de los más cercanos colaboradores del ex presidente Enrique Peña Nieto (2012-2018). El ex directivo ya enfrenta otra orden de captura, también solicitada por la Fiscalía General, acusado de lavado de dinero.
Lozoya, sus familiares y la empresaria “cuentan con ficha roja de Interpol con relación a los delitos probablemente cometidos” en el caso Odebrecht, explica un comunicado de la fiscalía. “El ministerio público federal presentó ante el juez de control todos los elementos de probanza necesaria, en un caso que por mucho tiempo estuvo congelado en forma tan criticable”, agrega el texto, lo que fue tomado como una directa crítica al gobierno anterior.
Odebrecht se vio involucrada en casos de corrupción en distintos países latinoamericanos, principalmente en Brasil, Perú y Argentina. Pero según reveló la prensa brasileña, en México pagó millonarios sobornos que habrían terminado en la campaña presidencial de Peña Nieto. El ex mandatario fue investigado en su momento, aunque la Fiscalía cerró el tema argumentando que los presuntos delitos habían prescripto.
En esa época, las autoridades de la fiscalía mexicana informaron que Odebrecht y la petroquímica brasileña Braskem se declararon culpables de pagar sobornos a entonces funcionarios de Pemex por $10,5 millones de dólares de 2010 a 2014, pero sin precisar el destino de los recursos ni la identidad de quiénes los recibieron.
México y Venezuela son los únicos países donde no se produjeron sanciones contra altos funcionarios vinculados a sobornos de Odebrecht.
Sobre la acusación de manejo de recursos de procedencia ilícita, que ameritó una primera orden de captura, Lozoya estaría directamente involucrado en la compra por parte de Pemex de una vetusta planta siderúrgica a un costo de 500 millones de dólares, considerado un precio sumamente excesivo. Con parte de esos recursos, Lozoya habría adquirido una lujosa residencia.
Días atrás, Lozoya debía presentarse a declarar ante un juzgado por este primer caso, pero declinó hacerlo con el argumento de que se trataba de una “persecución mediática”.
Sus abogados aseguran que se encuentra en México y han solicitado que Peña Nieto y otros exfuncionarios se presenten a declarar en el caso de la compra de la siderúrgica.
Lozoya es el primer ex funcionario de alto nivel que es investigado por el gobierno del socialdemócrata Andrés Manuel López Obrador, quien asumió la presidencia con el compromiso firme de erradicar la corrupción en México. ■