Debaten hoy la emergencia alimentaria y Cambiemos facilitará la media sanción
La Cámara se reúne a las 11.30. Para bajar las tensiones sociales, el oficialismo decidió no frenar la aprobación.
Finalmente, la Cámara de Diputados reabre hoy el recinto para tratar la emergencia alimentaria reclamada por los movimientos sociales, que se movilizarán hacia el Congreso. Con aval del presidente Mauricio Macri, el oficialismo está dispuesto a habilitar la sesión especial convocada para las 11.30, pedida por la oposición, e incluso acompañar el proyecto, que obtendría media sanción.
Desde Santa Fe, donde recorrió obras ferroviarias, el jefe de Estado hizo pública ayer su directiva de no “bloquear” el debate. “La ministra (de Desarrollo) Carolina Stanley está siempre ayudando a aquellos que tienen la obligación primaria, que son los gobernadores. Estamos para asistirlos. Si quieren ampliar el proyecto, estamos disponibles”, aseguró, aunque remarcó que la ley “ya está desde 2002” y que hay “herramientas suficientes para atender” las necesidades sociales.
En Buenos Aires, funcionarios y legisladores oficialistas llevaron adelante una seguidilla de reuniones para definir su estrategia. A la mañana, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, el ministro Hernán Lacunza y Stanley se juntaron en la Casa Rosada con los presidentes de los tres bloques de Cambiemos en Diputados: Mario Negri (UCR), Álvaro González (Pro) y Juan Manuel López (CC).
Ahí ratificaron la decisión de dar quórum y “seguramente” acompañar el proyecto consensuado de la oposición. A pesar de que consideran “redundante” la ley, sostienen que es una forma de no dar razones para nuevos acampes ni conflictos en la calle. “Si Macri lo hacía por DNU seguro iba a faltar algo o iban a pedir que sea diferente”, señalan. De hecho, creen la sesión desnudará las “diferencias” existentes dentro de los distintos espacios que conforman el Frente de Todos respecto al liderazgo de Alberto Fernández. En el kirchnerismo lo desmintieron: “Esta ley es también una herramienta útil para el próximo presidente”, dijeron desde el bloque del FpV.
Más tarde, el interbloque de Cambiemos se alineó detrás de esa postura. “Seguramente mañana salga una media sanción”, declaró López tras la reunión y no descartó la posibilidad de modificaciones. “Estamos para discutir todo. El proyecto plantea que la ayuda sea nacional. Hoy las provincias tienen superávit fiscal, tal vez puedan ayudar”, deslizó.
Si bien el pedido de sesión especial prevé el tratamiento de 12 proyectos, la idea es concentrarse en el texto consensuado por los distintos bloques opositores que establece prorrogar la emergencia alimentaria hasta 2002 e incrementar “como mínimo” un 50 % las partidas presupuestarias vigentes destinadas a programas de alimentación y nutrición.
La duda sobre el costo fiscal del proyecto sigue abierta. De acuerdo a un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) si el incremento del 50 % se calcula sobre el presupuesto vigente el costo ascendería a $ 10.489 millones. En cambio, si la cuenta se hiciera sobre las partidas no ejecutadas el costo sería de $ 4.061 millones.
Ese es un punto sobre el cual Cambiemos querrá discutir, aunque reconocen que no será un motivo de obstrucción. “No afecta el presupuesto de este año ni las metas fiscales pautadas que es lo que nos preocupaba. Las reasignaciones presupuestarias ya las venía haciendo la ministra Stanley”, plantearon.
La duda sobre el costo fiscal del proyecto sigue abierta. Podría insumir hasta $ 10.489 millones.
El presidente de la Cámara, Emilio Monzó, se reunió ayer con Negri y con el jefe del bloque del FpV, Agustín Rossi. La idea es que la sesión sea “ordenada” y “corta”. La oposición designará un orador por bloque. El del FpV será Carlos Castagneto.
Después de 77 días sin sesionar, la Diputados se reactiva así con este tema, que tomó dimensiones impensadas. Hace dos años que los movimientos sociales reclaman la emergencia, pero en este último tiempo el primero en impulsarlo fue el candidato de Consenso Federal, Roberto Lavagna, y la movida creció cuando la pidieron la Pastoral Social, la CGT y los intendentes del PJ. ■