Vinculan a Báez con la muerte misteriosa de un empresario
Vittorio Gotti murió en 2004 en un accidente automovilístico. Ahora su hija habló ante el juez de amenazas K.
En el marco de una nueva causa donde se investiga al financista Ernesto Clarens, a Sergio, Fausto y Fabiana Gotti, entre otros, por haber lavado supuestamente por más de U$S 160 millones, declaró la hija del empresario Vittorio Gotti. Después de muchos años de silencio se refirió al “accidente” automovilístico en el que falleció su padre. Reveló que previo a ello “me contó de presiones que recibió para vender la compañía” y que el fundador de Gotti Hermanos S.A. le entregó “un arma porque temía por la seguridad de la familia” y se refirió a cómo “metieron de interventor a Lázaro Báez” que terminó quedándose con la firma.
En su descargo en este expediente conexo a la causa Vialidad por la que se juzga a Cristina Kirchner y a Lázaro Báez, Fabiana Gotti fue citada por el juez Julián Ercolini a declarar. El fiscal Gerardo Pollicita avanzó en la investigación sobre el movimiento de fondos de Ernesto Clarens, el financista que supo ser dueño de Invernes SA que tuvo autorización para el cobro de certificaciones de obra que provenían del gobierno de Santa Cruz a nombre de Gotti SA. En su confesión, Clarens en la causa de los Cuadernos de las Coimas contó que la principal constructora de Báez era Gotti SA, entonces "se creó Austral Construcciones como reaseguro de los negocios por si quebraba Gotti, pero Lázaro se la quedó y con eso mantuvo los ingresos de las certificaciones de obras". Esta historia fue rescatada por Fabiana Gotti y coincide con una versión que había contado Leonardo Fariña. Hasta ahora, Báez negó varias vece ser dueño de la constructora Gotti, pero después los papeles demostraron lo contrario, y en ese marco se refirió a alguien que era “costoso a mis afectos” dijo. “Hace más de 40 años mi padre fundó cona sus hermanos la constructora Gotti SA.”, dijo la hija. Agregó que nunca había trabajado en la firma: “todo lo que sabía sobre la constructora era lo que él me contaba de hecho en la empresa nunca habían trabajado mujeres de la familia. Tenemos una estructura familiar italiana encabezada por un padre sobreprotector que a la luz de la sociedad actual sería calificada de profundamente machista”, dijo.
Entonces, se refirió al momento previo al accidente en el que fallecieron sus padres. “Tiempo antes de morir (su padre) me dijo que desde el poder político de la provincia de Santa Cruz era presionado para que vendiera su empresa, en algún momento las presiones implicaron ahogar financieramente a Gotti”. El empresario K que se quedó con la constructora fue parte de su relato: “También llegó a mencionar sin explayarse sobre el punto que le habían metido de interventor dentro de la empresa a Lázaro Báez”.
“No iba a la empresa y yo no conocía sus obras ni su forma de operar ni su situación económico-financiera sin embargo, era evidente que a principios de 2004 las presiones que sentía mi padre se transformaron en amenazas. Su preocupación fue tal que en enero o febrero de 2004 antes de morir, cuando estaba apunto de ir de vacaciones junto a mis dos hijas me dio un arma y me rogó que la llevara en la guantera del auto pues temía por su vida y la de la familia”, explicó Gotti. Fue en 2004 cuando los padres de Fabiana junto a un amigo que estaba de visita en Santa Cruz, fallecieron en un hecho automovilístico. “Vecinos de Río Gallegos comentaban sobre la posibilidad de un atentado, en lo personal sólo podía recordar el temor de mi padre el día que me entregó el arma”. "A mediados de 2017 obtuvo en la fiscalía interviniente en Chile copia de la pericia mecánica realizada a la camioneta en la que viajaban mis padres. Lamentablemente no pude hacerla examinar por peritos en la materia, tampoco pudieron decirme en Chile quién había retirado el rodado luego del hecho”.