Pronósticos de mayor presión impositiva y reclamos gremiales
La evaluación negativa sobre el comportamiento de la economía alcanzó un nuevo hito. En 2018, un 23% de los encuestados en el Coloquio de IDEA creía que el período anterior había sido positivo: era récord de pesimismo desde la crisis de 2001-2002. La evaluación de este año es aún peor.
Sólo uno de cada cinco entrevistados por IDEA para su encuesta de expectativas hizo una evaluación positiva de 2019: un 19% según el relevamiento de D'Alessio que se presentó este jueves en el Coloquio. "Si el indicador de 2018 ya era bajo, este es inferior", recalcó Eduardo D'Alessio,
Antes de las PASO, había una percepción empresaria sobre una posible mejoría de la economía. Eso se derrumbó tras la devaluación y otros eventos posteriores. Pero los problemas no son sólo hacia atrás, también se presentan hacia adelante: el 61% cree que habrá suba de impuestos y casi igual porcentaje (62%) supone que habrá mayor presión sindical.
Aunque no se dijo con nombre y apellido, estos escenarios son los previstos para un triunfo de Alberto Fernández en las generales. La mitad de los consultados suponen un congelamiento de tarifas. Las previsiones son que habrá caída de inversión, disminución de ventas y empleos. Las respuestas sobre lo que esperan para el próximo semestre quedó casi partida en tercios entre positivas, "igual que ahora" o peor. "Entre los factores negativos se destacan inestabilidad política, errores en el plan económico, inflación, incertidumbre, devaluación post PASO y caída de actividad", detalló D'Alessio.
Las exportaciones se presentan como casi la única luz de esperanza. El 37% supone que crecerán y el 45% que se mantendrán en los niveles actuales. "Las exportaciones agrícolas andan por los US$ 20.000 millones, mientras que la industria importa por US$ 14.000 millones. Aún hoy queda un superávit de US$ 6.000 millones", reflexiona Luis Secco, economista que asesora a IDEA en la lectura de estos resultados.
Casi todos los otros números son desalentadores: sólo un 12% supone un aumento de la inversión. El 34% espera una mejora de las ventas. El 47%, que disminuirán los niveles de empleo. "Estamos en un punto muy alto de pesimismo. La participación de la inversión en el PBI es bajísima: un 12,7%", expresa Secco. ■