El oficialismo retuvo tres importantes bastiones del interior bonaerense
Garro en La Plata y Gay en Bahía Blanca logaron la reelección. Y en Mar del Plata se impuso Montenegro.
Por fuera de los municipios del conurbano bonaerense, el foco de la elección en la Provincia estaba puesto en tres grandes ciudades del interior provincial que el oficialismo buscaba y logró retener: La Plata, Mar del Plata y Bahía Blanca.
La capital bonaerense era una de las apuestas fuertes de Juntos por el Cambio. Tanto por el valor simbólico de la ciudad cabecera como porque el oficialismo necesitaba revertir los casi 10 puntos de diferencia que obtuvo el Frente de Todos en las PASO. Con 87,22% de las mesas escrutadas, Julio Garro retuvo la intendencia de La Plata frente a la candidata del kirchnerismo, Florencia Saintout.
El oficialismo superaba el 48% de los votos y le sacaba casi 10 puntos de ventaja a la ex decana de la Facultad de Periodismo de la UNLP. El 11 de agosto, las 5 listas del Frente habían sumado 47 puntos y Garro, sin competidores internos, llegó al 37%. La postulante K no pudo retener el apoyo a todas las boletas que amalgamó la interna del Frente de Todos. Y en La Plata, el macrismo “la dio vuelta”.
La táctica de Juntos por el Cambio fue “municipalizar” la campaña y promover el corte de boleta. “Vamos a buscar los votos de los ciudadanos que eligieron otras fórmulas para Nación y Provincia”, era el argumento del actual alcalde platense, que logró la reelección.
En la vereda opuesta, la dirigente cercana a La Cámpora planteó un trabajo territorial en los barrios. En la semana previa al cierre, evitó exponerse: decidió no asisitir a un debate entre los cinco candidatos a intendentes que organizó el colegio de Abogados de La Plata.
El macrismo también retuvo Bahía Blanca, donde en las Primarias de agosto el intendente de Cambiemos, Héctor Gay, había sacado apenas 4.600 votos de diferencia, un 2,66% más que su rival del Frente de Todos, Federico Susbielles, presidente de la Confederación Argentina de Básquetbol.
“Sabíamos que haciendo un poco de campaña se podía. Hemos puesto el cuerpo y este triunfo es fruto del trabajo en equipo”, destacó el intendente reelecto con el 50,98%, nueve puntos sobre su rival.
La más complicada parecía General Pueyrredón, que tiene a Mar del Plata como cabecera. Con el 92,08% escrutado, el diputado Guillermo Montenegro logró la intendencia para el oficialismo con el 40,60%, frente al 37,52% de la diputada camporista Fernanda Raverta.
La elección se vislumbraba muy pareja desde las PASO, cuando a Raverta, aún siendo la más votada, no le había alcanzado para ganar. En ese momento entre los dos macristas, Montenegro y la radical Vilma Baragiola, la desplazaron a un segundo lugar. A su vez, el intendente Carlos Arroyo, ganador en 2015 por Cambiemos con 47 puntos, sacó el 3,94%, un pésimo resultado teniendo en cuenta el modo en que había llegado a la intendencia. ■
Informe: Fabián Debesa (La Plata); Guillermo Villareal (Mar del Plata); Gabriel Bermúdez (Bahía Blanca).