Femicidio en un hotel: la pareja de la víctima se arrancó una tobillera y huyó
Había sido denunciado por violencia de género por su ex. Giselle, su actual mujer, tenía 27 años y murió asfixiada.
La pareja visitaba habitualmente el hotel alojamiento del barrio El Libertador, en Tres de Febrero. La recepcionista los reconoció y recordó que los veía dos o tres veces por mes. Pero el miércoles por la mañana, al notar que no habían dejado la habitación, personal del hotel ingresó a la habitación y encontró un “desastre”.
Giselle Fasanella (27) murió asfixiada. La autopsia confirmó que la causa de la muerte fue “estrangulamiento por lazo”. Ayer peritaban prendas que estaban dentro de la habitación para determinar si se usaron para matar a la joven. También, una cinta que pendía del ventilador.
Lo que se sabe es que Giselle entró con su pareja, con quien convivía junto a sus hijos. Pero, además del testimonio de los testigos, corroboraron que estuvo en el lugar porque tenía una tobillera electrónica “por orden de un tribunal de familia”.
El dispositivo se denomina “pulsera electrónica de control de agresor” y se usa en causas vinculadas a violencia de género donde las denunciantes solicitan restricciones perimetrales. El transmisor alerta a las autoridades si se vulnera la distancia que dispuso la Justicia. Fuentes judiciales explicaron a Clarín que la denunciante no era Giselle, sino otra mujer.
Después de cometer el crimen, el hombre se arrancó la tobillera y escapó. Anoche seguía prófugo y esperan dar con él para saber qué ocurrió.
A quien sí había denunciado Giselle era a su ex pareja. Había sido víctima de violencia de parte del padre de sus hijos, quien está detenido por esas agresiones. Esa era otra línea de investigación al inicio del caso, pero se descartó rápidamente.
A partir del hallazgo del cuerpo especularon con la posibilidad de que se hubiera tratado de un juego sexual. Sin embargo, fuentes del caso indicaron a Clarín: “Si esto fue una especie de juego brutal, no lo sabemos. La escena era un desastre, sabíamos que convivía con este muchacho y que tenía estos antecedentes. Uno sospecha que si muere tu conviviente, la vas a buscar o aparecés. Como no lo hizo indagamos más y se confirmó con la tobillera que estuvo en este lugar durante toda la noche. Después se la sacó y escapó por una ventana”.
Todo empezó el martes a las 22, cuando la pareja ingresó al hotel. Al otro día no contestaban los llamados. Los empleados del albergue “R8 Hotel”, ubicado en la calle Ituzaingó y ruta 8, ingresaron y encontraron el cadáver de Fasanella sobre la cama y tapado con una sábana, por lo que llamaron a la Policía. En el ventilador de techo fue hallada una cinta. Según el informe que recibió la fiscal Marcela Costa, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 6 de San Martín, la causa de muerte fue “paro cardiorrespiratorio traumático” por “asfixia” con un mecanismo de muerte de “estrangulamiento a lazo”.
“El surco de ahorcadura en la víctima es incompleto, no quedó calcado en toda la circunferencia del cuello, quedó con la nuca libre. Eso indica que pudo haber estado colgada”, explicó a Télam un investigador. ■