El invicto Cóceres tiene la chance de su vida, con las apuestas en contra
“No pienso desaprovechar esta oportunidad”, avisó el boxeador de 28 años en Los Ángeles.
Seguramente Marcelo Esteban Cóceres habrá soñado decenas de veces con la chance de combatir por un título mundial. Seguramente habrá visualizado esa oportunidad, más lejos o más cerca, desde la primera vez que se calzó un par de guantes. Seguramente habrá construido esa escena imaginaria en un gran escenario y ante una multitud. Lo que seguramente no habrá imaginado es que esa posibilidad llegaría en una cartelera que tendría como atractivo principal la pelea entre dos youtubers. Sí, entre dos youtubers. Particularidades de los tiempos 2.0.
El entrerriano subirá cerca de esta medianoche al cuadrilátero del Staples Center de Los Ángeles, con la difícil misión de intentar arrebatarle el título supermediano de la Organización Mundial de Boxeo al británico Billy Joe Saunders.
Ese duelo, el más importante del día a lo largo y lo ancho del planeta, será el complemento del enfrentamiento, tan extravagante como taquillero, entre el estadounidense Logan Paul y el inglés Olajide Olatunji, conocido como KSI, dos celebridades de las redes sociales.
El invicto Cóceres, nacido hace 28 años en Villaguay y radicado en San Jorge, hizo toda su carrera profesional, que se compone de 28 victorias (15 por nocaut) y un empate, en suelo argentino y casi toda en las categorías superwelter y mediano. De hecho, en septiembre había aparecido 10° en el ranking mediano de la OMB. Sin embargo surgió esta chance y decidió tomarla.
“Llevo toda la vida soñando con una oportunidad como ésta. La estoy esperando desde que empecé a boxear, me llega en mi mejor momento y no la pienso desaprovechar”, aseguró el entrerriano, quien no dejó de entrenarse después de su última pelea, el 21 de septiembre, cuando superó por puntos a Germán Peralta en el microestadio de Huracán.
El Terrible no es favorito ni mucho menos: en las plataformas digitales, quien apuesta un dólar por el argentino se llevará 18 en caso de triunfo; quien apuesta un dólar por su rival cobrará apenas 1,01. Sin embargo eso no lo desalienta.
“Sé que voy a enfrentar a un gran rival, dos veces campeón mundial, uno de los mejores de esta división. Pero me van a ver como nunca. Vine a Los Ángeles a ganar y a llevarme el cinturón a casa”, avisó durante la conferencia de prensa, que se realizó el jueves en el restaurante TAO, en el corazón de Hollywood.
Saunders también combatirá por primera vez en Estados Unidos, aunque su recorrido profesional incluye rivales de mayor jerarquía y cinco peleas mundialistas. El zurdo de 30 años le arrebató en 2015 el cinturón mediano de la OMB al irlandés Andy Lee y lo defendió tres veces. En octubre del año pasado, dio positivo en un control antidoping voluntario por consumo de oxilofrina, un estimulante que aumenta la capacidad muscular y cardíaca. La salida elegante para el inglés, que le evitó una sanción, fue dejar vacante la corona.
En mayo de este año, superó por puntos en decisión unánime al serbio Shefat Isufi y así se apoderó del cetro supermediano de la OMB, que defenderá por primera vez ante Cóceres. “Tengo mucho respeto por mi adversario, pero estoy acá para dar espectáculo y demostrar mi nivel y mis habilidades en Estados Unidos. Sé que tendremos un estadio colmado y aunque nadie me conoce acá, después del sábado lo harán”, sostuvo el británico.
El representante olímpico en Beijing 2008 no sólo está enfocado en este combate, sino que además proyecta su mirada hacia 2020 y hacia ese objetivo común a tantos púgiles de las categorías intermedias: Saúl Canelo Álvarez. El apellido de Saunders ya había sido mencionado como posible rival del mexicano justo antes de su control antidoping positivo. Una victoria en el Staples Center lo pondría nuevamente en el radar del pelirrojo. Un triunfo de Cóceres, en cambio, sería uno de los mayores batacazos de la temporada pugilística. ■