Dubois es el pesado con manos de hierro que quiere ir por todo en 2020
El inglés cerró el año con cinco peleas y cinco triunfos antes del límite. Nadie le aguantó más que cinco rounds.
El deporte súper profesional (y el dinero que funciona como su imprescindible combustible) muchas veces acelera los procesos y obliga a saltar etapas. Por eso será Caroline la encargada de buscar en Tokio 2020 una medalla olímpica para la familia Dubois y para el boxeo británico. La muchacha de apenas 18 años, ganadora del oro en la categoría ligero de los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires 2018 , campeona mundial juvenil y tetracampeona europea, asumirá el compromiso que parecía destinado a Daniel, uno de sus diez hermanos, a quien la película del boxeo amateur le pasó demasiado rápido.
Porque Daniel Dubois, el chico sobre quien el boxeo inglés depositaba sus esperanzas de repetir el logro de Anthony Joshua, medalla de oro en la división máxima en Londres 2012, eligió seguir sus pasos, pero en el campo rentado. Con 22 años y 13 nocauts en 14 combates profesionales, el londinense asoma como el prospecto más interesante entre los pesados y amenaza con asaltar en 2020 el podio de los grandotes.
“Me estoy haciendo un nombre, voy avanzando de a poco y subiendo de rango”, explicó Dubois después de noquear en julio a Nathan Gorman, un ex compañero de gimnasio en su derrotero amateur y primo del carismático Tyson Fury. Esa victoria le permitió conquistar el título británico. “Esto es un viaje y no tengo apuro. Cada actuación envía un mensaje a mis rivales. Estaré allí con ellos muy pronto”, añadió.
“Ellos” son el propio Joshua, quien recuperó en diciembre los títulos de la Asociación Mundial de Boxeo, la Organización Mundial de Boxeo y la Federación Internacional de Boxeo al derrotar al mexicano Andy Ruiz;
Fury y el estadounidense Deontay Wilder, monarca del Consejo Mundial de Boxeo. Los tres son los dominadores de la categoría reina. A ellos les apunta Dubois en un futuro no demasiado lejano. “Me gusta mucho ese chico. Me gustan su dedicación al deporte, su disciplina, su entusiasmo y su disposición para aprender”, lo elogió Wilder.
Después de aquella victoria sobre Gorman en el quinto asalto sumó otras dos ante al ghanés Ebenezer Tetteh por el título vacante de la Mancomunidad británica y, dos semanas atrás, frente al japonés Kyotaro Fujimoto con una definición en el segundo round tan categórica como angustiante ya que el perdedor permaneció varios minutos tendido en la lona y debió recibir asistencia de oxígeno antes de ser retirado del cuadrilátero. Así cerró 2019 con cinco presentaciones y cinco victorias antes del límite. Ningún adversario le aguantó más que cinco vueltas.
El poder de sus puños es indudable, como bien puede acreditar Fujimoto, pero esa no es la única virtud del espigado Dubois (mide 1,96 metros), quien además cultivó una buena técnica en su formación amateur y es veloz en una división en la que esa característica no abunda. Seguramente esas fueron las cualidades que llevaron al experimentado promotor Frank Warren a seducirlo para dar el salto al profesionalismo en abril de 2017.
El próximo objetivo de Warren es medir a Dynamita Dubois con Joe Joyce, medallista de plata en Río de Janeiro 2016 y otro de los ingleses que viene pidiendo pista (está invicto tras 10 presentaciones profesionales, con nueve nocauts). La fecha tentativa para ese enfrentamiento es abril.
Mientras tanto, Wilder y Fury ya tienen programada para el 22 de febrero en Las Vegas la revancha del combate que empataron en diciembre de 2018 en Los Angeles y Joshua parece apuntar para su próximo compromiso al búlgaro Kubrat Pulev, un adversario poco atractivo y de bajo riesgo. Así, las chances para que Dubois se pruebe con un rival de primera línea parecen escasas antes del segundo semestre de 2020. Sin embargo, él sabe esperar. ■