En medio de una doble crisis, Isabel II cumple 68 años de reinado
El momento está reflejado en el inicio de la primera temporada de The Crown, la serie de Netflix que refleja la historia que empezó el 6 de febrero de 1952. Ese día, Isabel y su marido Felipe estaban en Kenia. Allí, la hija mayor del rey George VI recibió la noticia: su padre había muerto de cáncer de pulmón. En ese momento, Lilibeth, como la llamaban en su familia, se convirtió en Isabel II, la monarca que más años lleva en el trono en Reino Unido. Ayer se cumplieron 68 años del reinado, aniversario que la reina celebra en el medio de una de las mayores crisis de la realeza .
En la capital británica hubo ceremonias, como el gran saludo de la compañía de artillería real, con sus cañones junto al puente de Londres y también en el Green Park.
El palacio de Buckingham compartió un video del primer compromiso de la reina como monarca. Se la ve completamente de negro, respetando el duelo por la muerte de su padre, en un servicio en la Abadía de Westminster. La abadía difundió también otra foto de la reina, más actual, posando sobre su histórico piso.
Siempre con un perfil bajo, Isabel II capeó varios temporales políticos y familiares. Fue la reina de la posguerra, del conflicto en el Canal de Suez, reina durante todo el gobierno de la “Dama de hierro” Margaret Thatcher, durante la Guerra de Malvinas, reina ahora en el traumático Brexit. Pero quizás las crisis más fuertes con las que tuvo que lidiar fueron las que se dieron, y se siguen dando, puertas adentro de su familia.
La primera, que también refleja la serie que tiene en esa instancia a Claire Foy interpretándola, fue la relación de su hermana menor, la princesa Margarita, con el capitán Peter Townsend. La abdicación de su tío Eduardo
VIII para casarse con la divorciada Wallis Simpson estaba aún muy presente, y la Corona pesó más y ese romance secreto con un hombre casado terminó.
Mucho se ha dicho y escrito sobre la crisis que desató el divorcio de su primogénito y sucesor al trono con Diana Spencer. Lady Di se separó de Carlos, harta de la extensa infidelidad de su marido con Camilla Parker Bowles. La historia –y los mil rumores- tras el accidente de Diana en el Puente del Alma en París con su novio Doddy Al Fayed es conocida, al igual que el impacto que la muerte de Diana produjo en la monarquía, los súbditos y en los hijos de la princesa, en especial el príncipe Harry.
Harry y su mujer Meghan Markle le están haciendo pasar un aniversario de reinado complicado a Isabel. Hace menos de un mes los Duques de Sussex anunciaron su renuncia a la monarquía para ser financieramente independientes. Días después, se instalaron en Canadá con su hijo Archie. “Mi familia y yo apoyamos enteramente el deseo de Harry y Meghan de crear una nueva vida como una familia joven”, escribió Isabel en un documento.
Pero no es el Megxit el principal problema que enfrenta la reina de 93 años. Otro frente, judicial e internacional, involucra a su hijo predilecto, el príncipe Andrew, involucrado en el escándalo de pedofilia de Jeffrey Epstein, el millonario denunciado por abuso sexual que apareció muerto en una celda en Nueva York.
Después de que un procurador estadounidense confirmara que el FBI va a pedir la declaración del Duque de York, anteayer las abogadas de las víctimas le pidieron a Andrés, que fue amigo de Epstein durante años, que viaje a EE.UU. y colabore con el FBI en sus investigaciones sobre sus supuestos crímenes. ■