“Turquía no viola las áreas de jurisdicción marítima de ningún país”
Debido a que Turquía es el país con la costa más larga del Mediterráneo Oriental, continúa sus actividades de exploración y perforación dentro de los límites de su plataforma continental, según lo declarado a las Naciones Unidas desde 2004. Turquía no viola las áreas de jurisdicción marítima de ningún país, sino que ejerce sus legítimos derechos soberanos derivados del derecho internacional.
Sin embargo, con un enfoque lejos de ser realista, lógico y justo, la Administración Grecochipriota del Sur de Chipre (AGSC) y Grecia han reclamado que todas las islas tienen automáticamente plataformas continentales incuestionables y zonas económicas exclusivas (ZEE) con un efecto total sobre la delimitación. Ellos reclaman que existe una delimitación de la frontera marítima entre Meis (Kastellorizo) y las islas Chipre, y en un abuso total de su membresía, retratan sus llamadas reclamaciones de la plataforma continental/ZEE como fronteras externas de la UE quien ha adoptado una actitud parcial en las zonas marítimas sin competencia y derecho, y actúa como una autoridad de delimitación. Ese mismo enfoque unilateral y aislado también ha sido demostrado por los otros países del Mediterráneo Oriental quienes concluyeron tratados con la AGSC en lugar de llevarlos a cabo Turquía y han acordado zonas marítimas más pequeñas de las que hubieran tenido derecho. Desde 2003, la AGSC ha hecho acuerdos sobre delimitación de límites marítimos con los países vecinos de la isla de Chipre y ha otorgado, de manera arbitraria, licencias de concesión, muchas de las cuales coinciden parcialmente con la propia plataforma continental de Turquía para explorar el petróleo / gas natural.
Al actuar como si fuera el único propietario de la isla, la AGSC también socava los derechos iguales e inalienables del pueblo turcochipriota con respecto a los recursos naturales de la isla. La AGSC no está a favor de un acuerdo que considere a los turcochipriotas como copropietarios de la isla, sino que los ve como una minoría de facto y no está dispuesta a compartir el poder político y bienestar con los turcochipriotas. Tal enfoque de los grecochipriotas obstruye cualquier intento de permitir una posible resolución sobre el estado de la isla. La posición de la UE sobre el tema de las actividades relacionadas con los hidrocarburos en el Mediterráneo Oriental, distando de ser equitativa, refleja exclusivamente la posición grecochipriota que continúa con sus actividades unilaterales en el Mediterráneo Oriental sin tener en cuenta los derechos del pueblo turcochipriota con respecto a los recursos naturales de la isla. Ante estos acontecimientos que intentan abstraer a Turquía y a los turcochipriotas y violar sus derechos en el Mediterráneo Oriental derivados del derecho internacional, Turquía ha firmado el “Memorando de Entendimiento sobre la delimitación de las jurisdicciones marítimas” con Libia el 27 de noviembre de 2019.
Como reiteramos a nuestros interlocutores en cada ocasión, ningún proyecto que recluya a Turquía puede realmente tener éxito en el Mediterráneo Oriental. Estamos listos para hablar con todas las partes, con excepción de la AGSC, cuya contraparte son los turcochipriotas, para evitar una posible crisis en la región.
Sefik Vural Altay
EMBAJADOR DE LA REPÚBLICA DE TURQUÍA EN BUENOS AIRES