Arranque formal de la negociación con el FMI: llega la misión y verá a opositores
Encabezada por el venezolano Cubeddu arriba el miércoles en medio de la salida del vice del organismo.
Este miércoles llega a la Argentina la misión del FMI en medio de los ruidos que generaron las palabras de la ex presidenta y actual vice, Cristina Kirchner, en Cuba al señalar que el organismo debe realizar “una quita sustancial”, algo que no admiten sus estatutos.
La delegación dará inicio a la negociación formal por el préstamo del que se desembolsaron US$ 44.000 millones. Y tiene previsto entrevistarse con empresarios y gran parte del arco opositor.
La delegación del FMI estará presidida por el encargado del caso argentino, el venezolano Luis Cubeddu, quien ya desempeñó ese mismo cargo entre 2002 y 2004.
Y llega en medio de la razzia en el organismo que ya le costó la cabeza al ex jefe de la misión argentina, Roberto Cardarelli y acaba de cobrarse la figura del vice del organismo, David Lipton, designado por EE.UU.
El equipo del FMI arribará al país el mismo día en que el ministro de Economía, Martín Guzmán, se presenta ante la Cámara de Diputados para explicar los lineamientos generales de la negociación con el Fondo como con los acreedores internacionales.
Guzmán hablará en el Congreso de equilibrar las cuentas públicas.
Por cierto, las declaraciones de Cristina Kirchner agregaron presión a las negociaciones ya iniciadas por Guzmán, quien se reunió el martes pasado durante más de dos horas con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en Roma, y a los apoyos que recibió el presidente Alberto Fernández durante su gira por Europa, entre ellos los de España, Alemania y Francia.
A eso se sumaron las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien aseguró al flamante embajador en Washinton, Jorge Arguello, que se podrá contar con él en las negociaciones.
Según la Secretaría de Finanzas, a finales de diciembre último la deuda bruta ascendía a 323.177 millones de dólares, de los cuales unos 194.000 millones de dólares corresponden a la deuda en títulos públicos de mediano y largo plazo.
Esa es la negociación que Alberto Fernández aspira a concluir el próximo 31 de marzo antes de los millonarios vencimientos de abril.
Para el economista Jorge Vasconcelos, “en medio de las idas y venidas se advierte que las autoridades del nivel nacional intentan evitar el default y que, “al menos en esta etapa inicial, el gobierno de la Provincia de Buenos Aires se está alineando, aunque sin mostrar demasiada convicción. Estos episodios, además, han puesto en evidencia el poder de fuego de los acreedores, algo que el Ejecutivo deberá tener en cuenta. A menudo se plantea si hay un problema de liquidez o de solvencia con la deuda, pero ese debate surge de una visión estática. El quid de la cuestión es lo que la Argentina necesita para recuperar el crédito de modo sostenido, y esto tiene que ver menos con la reestructuración y mucho más con el tipo de políticas económicas que se adopten para salir de una estanflación de 9 años y recurrentes desequilibrios fiscales”.
La tarea no parece sencilla. De acuerdo con la consultora Analytica, por los elevados niveles de inflación, la Argentina es una economía sin crédito en pesos. “Esto hace que el consumo dependa esencialmente de los ingresos reales de las familias. A su vez, la volatilidad del tipo de cambio y la falta de acceso al financiamiento internacional, complican el desempeño de las exportaciones no tradicionales y la inversión. En este contexto, la economía termina dependiendo del consumo o lo que es lo mismo, de los salarios reales, y en menor medida de las jubilaciones”, sostuvo en su último informe.
Todos estos temas estarán en la agenda con el FMI. ■