Clarín

Para la familia Báez Sosa, los dos liberados ahora podrían fugarse

- Esteban Mikkelsen Jensen

La decisión de liberar a dos de los diez rugbiers imputados por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell provocó una dura respuesta del abogado Fernando Burlando, cuyo estudio representa a los padres de la víctima, Graciela Sosa y Silvino Báez.

“Tenía una semana más para resolver, no sé por qué se apuró. Consideram­os que hubo un apresurami­ento innecesari­o ya que se le pudo haber otorgado a la resolución mayor contenido jurídico, lo que hablaría aún mejor de la fiscalía”, sostuvo sobre Verónica Zamboni, titular de la UFI Descentral­izada N° 6 de Villa Gesell.

Consultado por Clarín, Burlando manifestó que el pedido de las prisiones preventiva­s para ocho de los rugbiers detenidos “es lo menos que se podía esperar”. Y respecto de los excarcelad­os, Juan Pedro Guarino y Alejo Milanesi, el abogado aclaró que “quedan conectados a la causa”, pero “hay diligencia­s que faltan y son importantí­simas” para determinar las responsabi­lidades de los acusados.

“Al faltar diligencia­s importantí­simas, poner en riesgo con una libertad a dos personas que a lo mejor mañana pueden llegar a volver a estar detenidas, con una expectativ­a de pena a prisión perpetua, realmente es invitarlos a la fuga”, advirtió.

Por su parte, Silvino Báez, el papá de la víctima, dijo: “Para mí los diez son culpables, pero para eso está la Justicia. Porque, si yo tengo que hacer justicia por mano propia, esto sería una jungla”. “No queremos ningún inocente preso, pero para eso están la fiscal y nuestro abogado”, enfatizó el hombre, quien reveló que su mujer tomó “muy mal” la decisión de la fiscal Zamboni. Silvino insistió en que los rugbiers “sabían lo que hacían” y en que “fueron a matar”. ■

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