Los hospitales suman camas pero hay preocupación por la escasez de insumos clave
Los médicos piden más barbijos y elementos descartables. Las autoridades aseguran que cuentan con stock.
Con la Ciudad casi desierta tras el sexto día de aislamiento y la aparición de nuevos casos de infección por coronavirus en su territorio, se acerca el momento de la verdad para el sistema de salud porteño. Fuentes del Gobierno aseguran que se tomaron las medidas para enfrentar la situación. Sin embargo, también se escuchan reclamos de médicos y enfermeros, que denuncian escasez de insumos en algunos centros de salud.
La falta de alcohol en gel es una de las situaciones que más inquieta a los miembros del Comité de Seguridad e Higiene de la Asamblea de Residentes y Concurrentes de la Ciudad. Pero, también, el envío de insumos de protección que muchas veces no cumplen los requisitos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para atender casos confirmados o sospechosos de COVID-19. O, directamente, la escasez de estos elementos.
Fuentes del Ministerio de Salud porteño dan detalles sobre el refuerzo del sistema, pero sobre todo respecto a camas. Consultados por este diario, indican que se sumarán 150 para cuidados críticos, cada una de las cuales estará equipada con un monitor, un respirador y un saturómetro, el dispositivo que mide la saturación de oxígeno en sangre. Además, cuentan con otras 30 camas que se liberaron tras la suspensión de intervenciones programadas.
Por otro lado, en el Garrahan, personal del área de Enfermería denunció que las gafas y camisolines que llegaron “no respetan las recomendaciones de la OMS para enfrentar la pandemia”. Un representante gremial de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) de ese establecimiento señala otros faltantes: “Hay escasez de alcohol en gel, de camisolines impermeabilizados y de mascarillas, tanto N95 como quirúrgicas comunes. El hospital podría argumentar que aún no tiene casos confirmados pero esto va a crecer y los insumos ya tendrían que estar disponibles”.
En el hospital Gutiérrez, en Recoleta, muchos médicos también están inquietos. Enviaron un comunicado al Gobierno porteño en el que exigen de forma urgente “provisión de todos los insumos necesarios, equipamiento individual completo para cada trabajador de la salud según función y actividad, capacitación continua para usarlo adecuadamente y puesta en práctica de protocolos actuales”, entre otros pedidos. Un reclamo similar, con aplausos incluidos, hizo ayer parte del personal sanitario del hospital Zubizarreta, en Villa Devoto.
En otros hospitales públicos, como el Santojanni, se busca tranquilizar al personal. “Los directivos nos dijeron que los insumos se entregarán según la demanda, pero que tenemos provisiones. Sólo nos recomendaron que seamos previsores y no sobreutilicemos los recursos ahora”, cuenta un residente de ese establecimiento.
Además de las camas para los cuadros más graves, desde el Gobierno porteño informan que se incorporarán 400 camas nuevas en salas de internación general, además de otras 200 que se desocuparán. Para los casos leves, hay otras 2.000 en hoteles. También se instalarán 16 Unidades Febriles de Urgencia y se adquirieron cuatro centros de monitoreo, seis ambulancias, 96 monitores y 180 respiradores.
En la Provincia -donde se administran 77 hospitales- también hubo reclamos de sectores gremiales por la falta de insumos. Ocurrió en algunos centros regionales y en establecimientos de alta complejidad. Pero la inyección de recursos revirtió esas falencias, según confirmaron a Clarín en establecimientos sanitarios del interior del GBA.
“Este fin de semana se completó la entrega de los elementos de sanidad básicos para enfermeros y médicos”, dijeron en un gremio de trabajadores de la salud. “No sobra nada. Porque ahora hay menor movimiento. Suponemos que si esto se complica, habrá que reforzar”, aclararon. Delantales, camisolines, barbijos, guantes, alcohol en gel. Son “elementos críticos” en esta etapa que se supone previa a la infección masiva que se registraría en un mes y unos días.
Según informaron desde el gobierno bonaerense, la compra incluyó 1.500.000 barbijos; 800 mil guantes de látex; 400 mil kits de ropa descartable, 300.000 barbijos tipo “tres capas”; 9.600 test para determinar coronavirus, Influenza A y B; 2.500 barbijos tipo N95 y 1.000 protectores oculares. También equipamiento para reforzar sectores críticos: 500 camas para unidades de terapia intensiva; 600 bombas de infusión volumétricas y 400 monitores multiparamétricos. ■
La Ciudad incorporará 150 camas para cuidados críticos. En la Provincia adquirieron 500.