El FMI alerta que el mundo está en una recesión peor que en la crisis de 2008
La titular del Fondo planteó que se requiere una asistencia masiva, y especialmente para los países emergentes.
El mundo está en recesión y en una situación aún peor que en la crisis que se abatió hace 12 años. El diagnóstico ominoso lo planteó ayer la directora gerente del Fondo Monetario
Internacional, Kristalina Georgieva. La funcionaria que esta recesión puede tener consecuencias peores que las del 2008/2009. Sostuvo que eso es suficiente base para recomendar una una asistencia de fondos masivos sin precedentes para enfrentarla.
“Está claro que hemos entrado en una recesión que será tan mala o peor que en 2008/9” y “la profundidad de esta recesión dependerá de dos cosas: contener el virus y tener una respuesta efectiva y coordinada a la crisis”, expresó Georgieva durante una conferencia virtual brindada ante periodistas de todo mundo.
Con el “parate repentino” de la economía mundial por el impacto de la pandemia de coronavirus, la estimación del Fondo “para las necesidades financieras generales de los mercados emergentes es de, como mínimo, US$ 2,5 billones”, dijo Georgieva.
La titular del FMI precisó además que en la actualidad hay 81 países que requirieron asistencia al organismo, una cifra sin precedentes, y de ellos 50 son de bajos ingresos y los restantes 31 emergentes.
En cuanto a los alcances de esta crisis, advirtió que “esto está en el extremo inferior” y sobre los mercados emergentes evaluó que “fueron tremendamente impactados por la pandemia, y podrán seguir siendo aún más impactados en el futuro”.
Durante toda la semana, y con motivo de la cumbre el G20, Georgieva advirtió del impacto de la expansión del coronavirus en los mercados emergentes, con cifras escalofriantes. Y reiteró el dato de que hubo una salida extraordinaria de hasta 83 mil millones de dólares de la periferia.
También advirtió que la necesidad financiera es tan grande que pidió duplicar la capacidad de financiamiento de emergencia inicial específica para frenar la pandemia, que se había acordado recientemente por 50.000 millones de dólares.
Georgieva, en su exposición hizo énfasis en la situación de los países emergentes que “se encuentran particularmente afectados por una combinación de crisis de salud, parada repentina de la economía mundial, fuga de capitales y, para algunos, una caída brusca en los precios de los productos básicos”.
“Es primordial que reconozcamos la importancia de apoyar a los mercados emergentes y las economías en desarrollo para superar la peor parte de la crisis y ayudar a restaurar el crecimiento”, dijo ante los líderes de las potencias económicas.
Agregó que “para aquellos que son exportadores de productos básicos, hay un golpe adicional de la caída de los precios”. “No deberíamos ir con pequeñas medidas ahora, cuando sabemos que es una crisis gigantesca. Nunca hemos visto la economía mundial parada; cómo hacemos para revitalizarlo es otro tema importante
Explicó que el organismo que encabeza “ya ha tomado medidas para proporcionar alivio para el pago de la deuda de sus miembros más pobres”.
El Fondo solicitó también que fortalezca su respuesta a la crisis al mejorar el acceso a sus instalaciones de emergencia bajo el Servicio de Crédito Rápido e instrumentos de financiamiento rápido, detalló.
Más allá de sus servicios tradicionales de préstamos, el FMI comunicó hoy que explorará opciones adicionales para ayudar a los miembros que experimentan escasez de divisas, según adelantó más temprano un comunicado conjunto firmado por Georgieva y el presidente del Comité Monetario y Financiero Internacional, Lesetja Kganyago.
Estos temas, serán discutidos por la Junta Ejecutiva del Fondo Monetario Internacional en las próximas semanas, con miras a aportar un sólido paquete de medidas para su consideración en las Reuniones de Primavera (boreal).
“Nuestro objetivo común es hacer que la respuesta del FMI a la crisis sea aún más efectiva, para ayudar a sus miembros a lograr una recuperación más rápida y fuerte “, concluyó la declaración. ■