“El Presidente nos abandonó”, la queja de un científico varado en España
Oscar Masciarelli lleva 40 días aislado en un pueblito con su esposa y su bebé. Lo envió el Conicet a hacer un intercambio con colegas de otros países.
“Cuando sientan que se están quedando solos, sepan que el Estado va a estar al lado suyo”. La frase del presidente Alberto Fernández de hace algunos días repercutió no de la mejor manera en el ya nervioso estado de ánimo de Oscar Masciarelli, científico del Conicet que se encuentra varado en España, junto a su mujer y su hijo de 13 meses, y que llevan casi 40 días de aislamiento.
El investigador cordobés, de Río Cuarto, especialista en microbiología agrícola, se encontraba haciendo una suerte de beca, un intercambio con otros colegas de distintos países, en la Universidad Jaume I de Castellón de la Plana, una ciudad ubicada en el corredor entre Valencia y Barcelona. “Estoy en un listado de cierta prioridad porque tengo un bebé de un año, pero no hay una respuesta concreta de nadie. Me agobia la incertidumbre y me estalló la vena cuando el Presidente dice que el Estado acompaña. El Presidente nos abandonó”.
Indignado, Masciarelli siente que “el presidente Fernández ensanchó la grieta, se equivocó al meternos todos en la misma bolsa, porque dijo que los que estábamos afuera nos fuimos cuando no se podía y en mi caso personal, y en el de muchísimos que estamos varados, me encuentro en el exterior desde febrero. Y tengo que aguantar que estúpidos por las redes me denigren e insulten y que me digan ‘jodete, vas a volver cuando nosotros queramos’”.
Masciarelli habla de injusticia, de discriminación y de absoluto ausentismo del Estado. “Es injusto lo que está pasando, me siento abandonado por mi país, a 14000 kilómetros de mi casa y de mis afectos, y encima llegué aquí (a España) enviado por un organismo del Estado que el señor Presidente tanto defiende y pregona, como es el Conicet ”, enfatiza quien viajó para un intercambio científico en relación a la identificación de la respuesta metabólica en plantas que reciben estímulos externos.
Catártico y con la necesidad de obtener “alguna respuesta de alguien, porque tanto el Consulado argentino como Aerolíneas Argentinas nunca saben nada”, Masciarelli remarca: “Cumplo con mi trabajo desde hace 25 años y con mis obligaciones tributarias. Hoy que necesito de ese Estado por que el que hago mucho, como tantos argentinos, y ese Estado no me tiende la mano”.
“Y pido por favor que no mientan más, no repatriaron a doscientos mil argentinos como dicen, ni tampoco lo hacen gratis, ni por una gesta patriótica. Yo tenía dos reservas por Aerolíneas Argentinas que me cancelaron sin motivo alguno, pero esos tickets cuestan 750 euros más impuestos. España, Italia, Francia y Alemania, en situaciones sanitarias más complicadas que la Argentina, no abandonan a sus compatriotas”.
Con una expresión mezcla de dolor y bronca cuenta que se enteró de que Iberia está enviando este domingo su tercer avión a Ezeiza para recoger españoles, después de otros dos viajes los días 11 y 15 de abril. “Me vuelve loco que el vuelo vaya desde aquí vacío, ¡qué mejor oportunidad que esa!, pero el Gobierno argentino no lo autoriza, no quiere autorizarlo.”
Sobre dos vuelos de Aerolíneas que se le truncaron, el investigador recuerda que el primero estaba previsto para el 21 de marzo. “El día 20, a la noche, por WhatsApp, me avisan que el regreso se cancelaba sin argumento. Pedí explicaciones y no respondieron. Y el segundo estaba programado para el jueves 16 y hace unos días me llegó la cancelación por mail”.
“La actitud del Gobierno para con los que estamos varados es, en parte, deliberada. El mismo Presidente deslizó que los que se fueron después del 13 de marzo deberán esperar y, como decía antes, caímos todos en la volteada”, dice el científico.
Masciarelli cuenta que se encuentra sin actividad universitaria, en un pueblito maravilloso que hoy parece “un pueblo fantasma”. “Salimos una vez por semana para hacer las compras, mi mujer o yo. El tema es que estamos cortando clavos para estar sanos los tres. Mi nene estuvo con un resfrío fuerte 5 días y la cabeza no me paraba. Encima tiene 13 meses, ya camina. Cuesta mantenerlo adentro”. ■