Los días de Maradona pasan por su recuperación y una preocupación
La cuarentena la atraviesa en Bella Vista. Volvió a bancar a Marchi y pidió por los jugadores del Ascenso.
El parate del deporte que impuso la pandemia del coronavirus no parece, a priori, fácil de llevar para un hombre de casi seis décadas (cumplirá exactamente 60 años en octubre) que transcurrió el 75 por ciento de su vida vinculado al fútbol profesional.
Sin embargo, Diego Armando Maradona aprovecha el tiempo libre que le deja la suspensión de la actividad para recuperar su rodilla derecha, de la que fue operado el año pasado, aunque sin perder de vista la situación de la pelota en Argentina.
El mejor futbolista de todos los tiempos atraviesa el período de aislamiento social obligatorio dispuesto por el Gobierno en su casa de Bella Vista, rodeado de mucho espacio y mucho verde. Desde allí, donde se encuentra acompañado por sus allegados de máxima confianza y el personal encargado de la limpieza y la cocina del lugar y de muy buen semblante tal como se aprecia en las fotos y videos que se reflejan en las redes sociales, se mantiene en contacto diario por videollamadas con el doctor Leopoldo Luciano Luque, uno de los integrantes del cuerpo médico que lo atiende.
La semana pasada Luque estuvo en la residencia de Maradona para hacerle un control. Le suministró las vitaminas que habitualmente consume y le dejó una nueva rutina diaria de ejercicios que incluye 30 minutos de caminata en la cinta, bicicleta y sesiones de masajes para mejorar la resistencia de la rodilla.
El 24 de julio Maradona fue operado en la clínica Olivos debido a un cuadro de sinovitis y artrosis en la rodilla que limitaba sus posibilidades de desplazarse. Desde entonces los progresos fueron muy marcados, cuentan desde su entorno.
Pero no sólo en la recuperación física está enfocado: el director técnico se mantiene en contacto telefónico casi a diario con Sergio Marchi,secretario general de Futbolistas Argentinos Agremiados, para conocer en detalle cómo evoluciona la situación de los planteles que llevan más de un mes sin entrenarse y, en algunos casos, con dificultades para cobrar.
“Estoy a muerte con el Turco Marchi. Muchos le pegan, pero es el tipo que siempre pone la cara por los jugadores”, había sostenido el entrenador de Gimnasia hace tres semanas. En aquel momento, cuando ya empezaban a divisarse los problemas de pago en algunos clubes, también fustigó a algunos dirigentes.
“Creo en el Turco Marchi y en el trabajo que hace; hoy tenemos que estar todos juntos tirando para el mismo lado y tampoco olvidarnos de los jugadores del Ascenso que son a los que más golpea esta situación. Pero creo en el trabajo del Turco y eso me da tranquilidad”, reforzó ayer en una nota publicada por el diario El Día.
“Hay algunos que ahora se hacen los boludos y quieren aprovechar este momento para no pagar, pero vienen con quilombos desde hace años.
Parece que siempre tuvieron una pandemia en sus clubes”, disparó Maradona, quien le ofreció a la dirigencia del club platense renegociar su contrato si eso sirve para aliviar la situación de la institución.
Por lo pronto el fútbol sigue parado y sin fecha de regreso a la vista. Frente a esa situación Maradona procura mantener el contacto telefónico con los jugadores de su plantel para conocer cómo se encuentra cada uno, no sólo en la faz física sino también en el aspecto anímico. Mientras tanto, todos -e incluso él mismo, como no puede ser de otra manera- esperan saber cuanto antes cómo se definirá la temporada.
“Con el trabajo que estábamos haciendo con mi equipo de trabajo no tenía ningunaduda que íbamos a salir de la zona del descenso; todavía falta para saber qué medidas tomará oficialmente la AFA. Entonces, de acuerdo a eso, con el cuerpo técnico seguimos planificando al pie del cañón para estar preparados para afrontar cualquier escenario posible”, dijo. ■
Se encuentra acompañado por sus allegados de máxima confianza.