Juntos por el Cambio se endurece tras la masiva movilización
Las manifestaciones y cacerolazos por la expropiación de Vicentin y otros reclamos al Gobierno envalentonaron a los referentes de la oposición, que ya venía con una postura más articulada ante el anuncio de la intervención que diluyó por el momento las diferencias e hizo menos visibles las disputas por los liderazgos. Aun sin confirmación sobre si habrá debate en el Congreso, las espadas legislativas de Juntos por el Cambio se preparan para una pulseada intensa y advierten que el escenario se tensará todavía más con esa discusión en medio de la etapa más complicada del coronavirus .
Las protestas a las que se subió la oposición sucedieron después de que el juez Fabián Lorenzini -a cargo del concurso preventivo- repusiera a los accionistas en el control de la empresa cerealera y Alberto Fernández le diera aire al pedido de Omar Perotti al magistrado para que Santa Fe forme parte de la intervención. Los opositores advirtieron que no bajarán la guardia, con la percepción de que tarde o temprano el debate llegará al Parlamento.
“Creemos que lo van a terminar mandando, por presión de Cristina. Con el banderazo, más todavía”, estimó un referente de la coalición opositora. En Juntos por el Cambio descontaron que los bocinazos y cacerolazos tendrán impacto en los próximos pasos del Gobierno, con la posibilidad de que “radicalice” la postura. “Que la oposición gane la calle con la bandera argentina los pone locos, pero si envían el proyecto las protestas van a ir en aumento”, evaluó otro legislador.
Como contó Clarín, en caso de discutirse la iniciativa en el Congreso el oficialismo podrá avanzar sin problemas en el Senado pero tendrá que conseguir al menos 11 apoyos por fuera del Frente de Todos en Diputados, con la oposición abroquelada. “Es una expropiación encubierta que desaloja a los propietarios de la empresa y los reemplaza por el Estado”, argumentó el radical Luis Petri.
“El Gobierno tiene que reflexionar. Si envía el proyecto al Congreso, el nivel de tensión va a ser muy alto. En 2008 había plata y no había virus ni muertos”, dijo a este diario Mario Negri -jefe del interbloque de Juntos por el Cambio. “Espero que el oficialismo escuche el clamor de los distintos sectores”, aseguró Cristian Ritondo, titular de la bancada del PRO.
“La confiscación es inconstitucional y una afectación a la propiedad privada que no se ve desde los tiempos de la dictadura de Onganía”, cuestionó Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica. ■
Fue una protesta que también tiene que ver con comercios sin abrir y se mezcla lo de Vicentin”.
Santiago Cafiero, jefe de Gabinete