Envían un avance del Presupuesto 2021, sin proyecciones concretas
El avance de Presupuesto 2021, que el Poder Ejecutivo envió a la Cámara de Diputados, no tiene una sola proyección concreta de lo que el Gobierno espera ocurra el año que viene. No hay cifras de inflación, crecimiento (si lo hubiera), situación fiscal, etc. Estos datos se conocerán cuando el proyecto definitivo sea enviado a mediados de septiembre.
El documento de 50 carillas se divide en críticas a la política económica del gobierno anterior, explicaciones de lo que se hizo en estos primeros seis meses de gobierno, puntualizaciones sobre medidas específicas tomadas en el contexto de la pandemia y algunas vagas líneas sobre lo que debería ser la economía después de superada la pandemia.
Las acciones sobre lo que se espera ocurra el año que viene -enunciadas como prioridades- se volcaron en el capítulo “Ejes centrales de la política económica en 2021”. Un resumen de ellas:
• Recuperar las fuerzas productivas, luego del impacto de la pandemia.
• Consolidar la construcción de un modelo de desarrollo económico inclusivo y sustentable que logre potenciar las capacidades productivas la utilización de la mano de obra bajo condiciones de trabajo dignas y con derechos y, así, mejorar la condición de vida de todos los habitantes.
• Ese desafío requerirá un proceso de transformaciones no sólo respecto al fallido esquema económico del periodo 2016-2019 sino también a lógicas de funcionamiento de la economía argentina que, a pesar de los avances logrados entre 2003 y 2015, se presentan como limitaciones estructurales al desarrollo nacional.
En tal sentido, el Gobierno se propone como objetivos principales de política, la transformación de cuatro aspectos estructurales de la economía argentina.
La primera de ellas es la lógica de acumulación: es indispensable impulsar un cambio estructural que propenda a lograr una estructura productiva distinta, cambiando la matriz de producción y de generación de valor agregado actual.
El segundo objetivo será el de aumentar el empleo y fortalecer la inclusión y generación de oportunidades para las y los argentinos. En lo concreto, significa pensar de manera integral la política social, la política del trabajo y la política educativa para llegar con estos derechos a cada joven y adulto y así poder generar un ciclo virtuoso de movilidad social ascendente.
La tercera: una intervención activa y multidimensional por parte del Estado. Como cuarto elemento, generar las discusiones y los ámbitos institucionales necesarios para lograr una mayor coordinación y cooperación en el marco de un diálogo social. ■