El retorno de la F 1 tras el coronavirus trae las curiosidades del GP de Austria
La carrera, que entregó escenas dramáticas, entró y salió del calendario. El circuito de subidas y bajadas tuvo tres nombres. Prost es su recordman y Lauda, el único local que la ganó.
En 1964, Austria recibió por primera vez a la Fórmula 1. Con idas y vueltas y cambios de circuitos, allí la categoría corrió 32 pruebas. Ahora, en 2020 y en medio de una pandemia, fue ese país el que se animó a acogerla nuevamente. Protocolos sanitarios y
de coronavirus mediante, Spielberg será la casa de los 20 pilotos y los empleados de los 10 equipos hasta el 12 de julio.
Conocido como Red Bull Ring desde que la empresa de bebidas energéticas compró el circuito en 2010, son varias las particularidades de ese trazado a lo largo de la historia de la categoría que en mayo cumplió 70 años.
Aquí una breve selección aleatoria de seis datos olvidados o poco conocidos del GP de Austria.
•El Gran Premio que entró y salió del calendario por su peligrosidad (y el tabaco). El GP austríaco tuvo su debut y despedida en aquel 1964. Los organizadores habían elegido la pista de aterrizaje de Zeltweg Airfield para armar el trazado pero, tras el triunfo de Lorenzo Bandini (Ferrari), fue considerado demasiado peligroso y desapareció del calendario. Con el deseo de volver a ser considerados por la Federación Internacional del Automóvil, los austríacos se trasladaron cinco kilómetros al norte, hasta Spielberg, para armar allí el nuevo autódromo que llamaron Osterreichring (“circuito de Austria”). Ferrari, otra vez, se quedó con la carrera gracias al manejo de Jacky Ickx y el GP mantuvo su plaza hasta 1987, cuando al cabo de varios accidentes otra vez lo consideraron peligroso. Y desapareció por una década. El ingeniero alemán Hermann Tilke se hizo cargo de su remodelación, como de muchos otros de los actuales circuitos de la F 1. Tardó un par de años hasta que en 1997 le dio a la categoría un nuevo trazado más corto, más moderno pero, fundamentalmente, más seguro que fue renombrado como A1 Ring por el apoyo de una empresa de la zona (A1 Mobilkom) y que se estrenó con la victoria de Jacques Villeneuve (Williams). Se corrió con normalidad hasta 2003, cuando las leyes anti tabaco de la Unión Europea golpearon al automovilismo, que tenía en esas empresas a grandes auspiciantes.
•Tres nombres para un mismo lugar. Después de la pista de Zeltweg, Spielberg fue la casa del GP de Austria. El nuevo autódromo llamado Osterreichring recibió a la categoría entre 1970 y 1987. Fue ese el primero de sus tres nombres. Si bien siguió funcionando hasta 1995, los accidentes
que allí se acumularon, uno de los cuales terminó en la muerte del piloto Mark Donohue durante los entrenamientos de 1975, obligaron a su remodelación. Hermann Tilke tuvo en Spielberg su primera prueba y en 1997 entregó un circuito más seguro que fue renombrado como A-1 Ring. Se usó hasta 2003, cuando otra vez salió del calendario y poco después entró en quiebra. En 2010, Mobilkom, el grupo austriaco de telecomunicaciones, se lo vendió a Red Bull que lo bautizó con su nombre actual.
•Subidas y bajadas entre las colinas. Muchos podrán decir que perdió la peligrosidad que tenía cuando era el antiguo Österreichring, pero el Red Bull Ring ofrece sus complicaciones: altitud en el inicio y curvas rápidas cuesta abajo. Además, la mayoría son ciegas por la elevación del terreno. En medio del bosque de Estiria, el pequeño trazado de 4,318 kilómetros ofrece en una vuelta corta tres rectas separadas por curvas a la derecha suaves pero cuesta arriba y, hacia el final, la exigente curva Rindt.
•Alain Prost, el recordman. Allí donde Carlos Reutemann (Brabham) hizo sonar el himno argentino en 1974, hubo un único piloto que logró que su himno se escuchara tres veces. El francés Alain Prost ganó el GP de Austria en 1983 con Renault y consecutivamente en 1985 y 1986 con McLaren. Desde entonces nadie pudo igualar su record; ni el máximo campeón de la categoría, Michael Schumacher, quien rompió su sequía en Austria recién en 2002 cuando Ferratests
ri le ordenó a Rubens Barrichello que le cediera el primer lugar.
•Ya pasaron 36 años sin una victoria austríaca. El 19 de agosto de 1984, Niki Lauda se convirtió en el primer y último piloto austríaco en ganar el GP de Austria con su McLaren. El ícono del automovilismo y tricampeón de la categoría (en 1975, 1977 y 1984) fue uno de los 16 pilotos austríacos en la historia de la F 1 pero el único que pudo ganar en su tierra, algo que no logró Jochen Rindt, el primer campeón austríaco de la categoría en 1970.
•Un circuito al que nunca le falta el drama. La F 1 seleccionó cinco momentos dramáticos vividos en Spielberg. Desde el despiste de Vittorio Brambilla luego de ganar en 1975, al toque de los McLaren de David Coulthard y Mika Hakkinen que en 1999 fueron segundo y tercero respectivamente, al choque de Nick Heidfeld (Sauber) a Takuma Sato (Jordan) en 2002 y la orden de Ferrari a Rubens Barrichello en esa misma temporada hasta el increíble roce entre los Mercedes de Lewis Hamilton y Nico Rosberg en 2016.w