Los bebés de Kiev, el lado oscuro de la maternidad subrogada en Ucrania
Ya está disponible en Clarín digital. La verdad sobre la clínica investigada por tráfico de personas.
Poco más de 13 minutos alcanzan para mostrar la felicidad, la angustia y el drama. La maternidad por subrogación de vientres en Ucrania es una realidad que incluye a nuestro país, pero también lo excede. El video documental “Los bebés de Kiev, la verdadera historia”, presentado hoy por Clarín con estreno exclusivo para suscriptores, lo aborda en todas sus dimensiones y con testimonios reveladores.
La pandemia de coronavirus, la cuarentena y la imposibilidad de los padres de viajar al encuentro de sus bebés empujó la verdad a la superficie. Esa realidad inesperada obligó a la clínica BiotexCom, elegida para los tratamientos, a alquilar un salón del hotel Venecia de la capital ucraniana e improvisar allí una nursery. La publicación en la página web de la clínica de las imágenes de decenas de bebés esperando la llegada de sus padres de intención iluminó la situación y alertó a los medios de todo el mundo.
En nuestro país, al menos 17 parejas esperaron la autorización para viajar a la búsqueda de sus hijos ya nacidos, o aguardaron allí el parto de la madre gestante. Clarín contó sus experiencias y acompañó su búsqueda hasta la llegada a Kiev a fin de mayo.
Esas historias fueron la punta del ovillo que al desenrollarse llevó hasta el extremo opuesto: el lado oscuro de la clínica BioTexCom, en la que nacen 400 bebés por año, y que en 2019 fue denunciada por tráfico de menores, mala praxis, evasión impositiva y documentación falsa. La causa judicial sigue abierta en los tribunales de Ucrania. Ese país y Georgia son los únicos de Europa en los que estos tratamientos son legales, y se han convertido en un mercado mundial de subrogación de vientres, produciendo hasta 3.500 nacimientos anuales.
Tal dimensión descubre el video documental de Clarín, con el trabajo en Kiev de la periodista Marina Sviridenko, que entre otros entrevistó a Albert
Totchilovsky, director de BioTexCom (en detención domiciliaria con tobillera electrónica); y Oleh, director comercial, y reveló los métodos para la contratación de las madres gestantes.
La investigación también profundiza las diferentes ofertas de tratamientos, entre las que se incluyen el Paquete Standard Plus y el VIP, que permite definir el sexo del bebé, y los costos en miles de euros.
El trabajo de la periodista australiana Samantha Hawley es otro punto central del relato.
En 2019 Hawley investigó el caso de dos bebés, varón y nena, cuyo nacimiento prematuro desembocó en el fallecimiento de al menos uno de ellos. Según testimonios que se contradicen, el varón murió a poco de nacer, y al conocer la tragedia los padres se negaron a buscar a la niña. Pero los dichos de un abogado especialista niegan esta versión ofrecida por la clínica y aseguran que a los padres les informaron el fallecimiento de ambos.
Según reveló la periodista australiana y cuenta la investigación de Clarín,
en la actualidad la niña pasa sus días en una institución para huérfanos.
Marina S. una de las madres gestantes, completa el círculo de relatos imprescindibles. La precariedad de sus recursos (cuenta que utilizó el pago para completar un baño con ducha e inodoro en su casa) vincula de modo directo con quienes denuncian al sistema por el abuso de mujeres con necesidades económicas.
La voz de Ángeles Álvarez, ex diputada española por el PSOE y dirigente de la asociación “No somos vasijas”, se levanta para sostener la denuncia por
“proxenitismo reproductivo”.
Las posturas de Marisa Herrera, investigadora del CONICET en Buenos Aires, y de la abogada Natalia de la Torre, completan un recorrido que incluye diferentes focos de análisis: las decisiónes personales de las parejas que realizan el tratamiento, de las mujeres que subrogan su vientre para la gestación del hijo ajeno, y la falta de regulaciones y de respuestas del Estado para abordar una realidad compleja.
“¿ Porqué, si una amiga no puede ser mamá, yo no puedo prestarle mi cuerpo para ayudarla a cumplir su sueño? ”, se pregunta Marisa Herrera, poniendo la lupa en la libertad de los cuerpos, otra de las cuestiones ineludibles.
Con producción periodística de Marcela Campos y Marina Maffuchi, y post producción de Jonatan Uñates, “Los bebés de Kiev” está disponible desde hoy en Clarín digital. ■