Deuda: del acuerdo a la ruptura, los 4 escenarios que traza un banco
La negociación por la deuda bajo legislación extranjera, que abarca bonos en manos de acreedores privados por un total de US$ 64.800 millones, puede llegar a diferentes resultados. Las posibilidades abarcan desde un canje exitoso, que sería lo ideal pero complejo de alcanzar por los porcentajes requeridos, pasando por otra opción que sería “un subóptimo”, según la calificó el banco de inversión Morgan Stanley, hasta las dos alternativas en las que no se alcance un acuerdo y se produzca el default.
Algunas modificaciones que se introdujeron en la última oferta presentada ante la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) llevan a que los escenarios posibles se vean “un poco más directos”, especificó el Morgan Stanley en un informe reciente. En concreto, se refiere a la introducción del “umbral mínimo” de participación requerido para que haya canje. Y, en esa línea, se pregunta si llegar al porcentaje para que se active la operación implica también alcanzar los porcentajes establecidos en las cláusulas de acción colectiva (CAC), conocidas como “antibuitres”.
De acuerdo a estas cláusulas, se debe alcanzar, para los títulos emitidos desde 2016 a esta parte (conocidos como “bonos M”), un 66,6% del total a canjear, más el 50% de cada una de las series de instrumentos intercambiados. En un porcentaje un poco menos estricto, para los “bonos K” (que son los colocados en los canjes anteriores, en 2005 y 2010), se debe llegar al 85% en el total y un 66,6% de cada una de las series.
Teniendo en cuenta estos aspectos, en Morgan Stanley identifican cuatro posibles escenarios:
• Si se alcanzan las CACsería el mejor resultado para la Argentina, “especialmente si se alcanzan los CAC en todos los bonos, ya que evitaría por completo los holdouts y, por lo tanto, evitaría futuras demandas”.
• Si no se alcanzan los CAC: es la opción que más se baraja hoy entre los analistas, y que no fue descartada por el Gobierno, que implica cerrar un acuerdo parcial, con una mayoría suficiente como para que el mercado que quede vigente sea lo más líquido posible.
• No se llega al “umbral mínimo”, pero siguen las negociaciones: sería mejor que las conversaciones continúen y que la la Argentina esté dispuesta a mejorar la oferta nuevamente, “tal vez con pagos a corto plazo o con un edulcorante”.
•El peor resultado: se daría si ocurre una ruptura completa, con poco margen para las negociaciones.w