Piden juicio oral para un cura acusado de abusar de cinco chicos
La Justicia de San Nicolás elevó a juicio oral la causa en la que un cura y párroco de un colegio, el portero de esa institución y una preceptora están procesados por abuso sexual simple calificado. Esa fue la carátula que determinó la fiscalía, encabezada por Hernán Granda. Los procesados fueron denunciados por los padres de cinco nenas y nenes: según la acusación, los tres abusaron de las víctimas cuando tenían entre 3 y 5 años.
Los chicos eran alumnos del jardín de infantes Belén, de la localidad bonaerense de San Pedro. Los procesados son Tulio Matiussi, el sacerdote, encargado legal y párroco de la iglesia de la que depende el jardín, Anselmo
Ojeda, portero del edificio, y María Luján Rubíes, preceptora.
Tanto Matiussi como Ojeda estuvieron en prisión preventiva tras la denuncia en diciembre de 2019, aunque luego el cura obtuvo la libertad, en mayo de 2019, y el encargado debió cumplir prisión domiciliaria. Rubíes, en cambio, no perdió la libertad. “El delito que se les imputa tiene una pena de entre tres y diez años de prisión efectiva, no es excarcelable”, explica a Clarín el abogado Ariel Fusco, representante de una de las víctimas.
La decisión de elevar a juicio la causa fue de Román Parodi, juez de Garantías. Según Fusco,“los acusados tienen 5 días para apelar la elevación a juicio oral; si eso pasa, tanto la fiscalía como el particular damnificado -las víctimas-, van a recusar a la
Cámara de Apelación y Garantías del Departamento Judicial de San Nicolás, y en ese caso debe definir la situación el Tribunal de Casación de la Provincia”. En concreto, la elevación a juicio oral aún no está firme.
La fiscalía y el juez pidieron el juicio oral luego de que las víctimas declararan en Cámara Gesell. El fiscal le negó a los acusados el pedido de sobreseimiento que presentaron sus abogados a la vez que rebajó la imputación de abuso sexual agravado con acceso carnal a abuso sexual simple calificado, detalló Fusco.
“Con esta elevación a juicio oral espero que ellos tengan miedo cuando apoyen la cabeza en la almohada. El mismo miedo que sintieron nuestros hijos” , dice Carla, psicóloga y una de las mamás denunciantes.w