Los candidatos deberán lidiar contra un contexto diferente
Ala hora de analizar el cuadro masculino de Roland Garros 2020 está la obligación de explicar el contexto en el que se jugará el torneo. Será mucho más tarde en el año, en una fecha en la que en París puede haber temperaturas un poco más bajas a las habituales del Grand Slam francés. También habrá mayores posibilidades de precipitaciones y eso podría llevar a que las canchas estén mucho más húmedas y más lentas.
A la cuestión meteorológica habrá que sumarle otro factor: se jugará con pelotas Wilson después de que durante mucho tiempo se usaron las Babolat. La nueva pelota mostró ser un poquito más pesada, más lenta, una pelota menos viva porque no rebota tanto contra el piso y no es tan “amigable” a la hora de generar efectos como su antecesora. Estas condiciones puebien den darle al español Rafael Nadal un nivel de dificultad mayor en la búsqueda de un nuevo título, el 13° en París y, tal vez, podría llegar a beneficiar al austríaco Dominic Thiem, flamante ganador del Abierto de Estados Unidos.
Pero mejor ir por orden a la hora de analizar ese cuadro. En la parte alta se encuentra el serbio Novak Djokovic, número 1 del ranking mundial y que viene de jugar muy bien en el Masters 1000 de Roma, quien convivirá en ese sector con jugadores de renombre y buen presente como los rusos Daniil Medvedev y Andrey Rublev, el griego Stefanos Tsitsipas, el italiano Matteo Berrettini y también el chileno Christian Garín.
Tanto Tsitsipas como Garín tendrán la dificultad extra de un tiempo menor de adaptación porque llegarán muy sobre la hora desde Hamburgo y además tendrán que someterse al protoSlam, colo sanitario de París que implicará hacerse los tests e incluso pasar algunas horas aislados.
Por la parte baja del cuadro se ven nombres que llevan a pensar que es un poquito más complicada. Asoma, obviamente, Nadal, pero también aparecen campeones de Grand Slams como el suizo Stan Wawrinka que jugará contra el británico Andy Murray en la primera ronda. Y también se observan tenistas que están teniendo muy buenos resultados como el noruego Casper Ruud, semifinalista en Roma, y Diego Schwartzman, que viene de hacer final en el Foro itálico dejando en el camino a Nadal y que enfrentará en el debut al serbio Miomir Kecmanovic, reciente campeón de Kitzbuhel.
También en esa porción está el alemán Alexander Zverev, que podría ser un primer gran obstáculo en los cuartos de final para Nadal. Thiem tendrá un partido interesante en el estreno frente al croata Marin Cilic, también campeón de un Grand Slam.
Por el lado de las mujeres en Roland Garros 2020, Simona Halep es la principal preclasificada y Karolina Pliskova es la segunda.
Al dividir el cuadro en dos mitades, en la parte superior si para Halep las primeras rondas podrían ser relativamente accesibles, tendrá que convivir allí con Elina Svitolina, que es la tercera favorita, siempre es candidata y puede ser un obstáculo para muchas.
Sin embargo, lo que más sobresale a la hora de repasar ese sector del cuadro es el posible choque de la cuarta ronda que tendrá como protagonistas a Serena Williams y Victoria Azarenka. Ya se sabe lo que significa Williams en el mundo en el tenis y lo que es su presencia para cualquier torneo de Grand en los que acumula 23 coronaciones. Pero para la estadounidense será también un verdadero problema si debe enfrentar a la bielorrusa, que vive uno de sus mejores momentos en todo sentido: título en Cincinnati, final en el Abierto de Estados Unidos y semifinalista en Roma tras llegar sobre la hora a otra superficie, al polvo de ladrillo. Azarenka, por los antecedentes recientes, es una de las grandes favoritas junto con Halep, al menos por ese lado.
Por el otro, Pliskova asoma como la principal candidata a llegar a la final. Habrá que ver cómo se presenta Jelena Ostapenko, que igualmente está lejos de sus mejores momentos. Lo mismo ocurre con Angelique Kerber, Petra Kvitova y Garbiñe Muguruza, que también fue campeona de este torneo, pero que está con dificultades para encontrar su mejor ritmo.