Djokovic disfruta: gana, anima al público y seca la cancha
El mejor tenista del mundo ya está en los octavos de final. Sólo cedió cinco games ante el colombiano Galán.
Novak Djokovic vive un 2020 envuelto en escándalos, desde los casos de coronavirus que se produjeron durante el circuito que organizó en plena pandemia hasta el pelotazo que lo excluyó de Flushing Meadows. Pero aún así el dominador del circuito nunca perdió su faceta más divertida, tal como mostró ayer en Roland Garros (18.209.040 euros).
El número 1 del ranking mundial ejerció su jerarquía ante el colombiano Daniel Galán para asegurar su lugar en los octavos de final pero además se hizo un tiempo para divertir a los espectadores que fueron habilitados para asistir al partido. Ocurrió durante el segundo set, que estuvo parado media hora por la lluvia.
En una exhibición de 25 minutos en la que ganó el 100 por ciento de los puntos que jugó con su primer saque, Djokovic se quedó con el primer set en el que expuso su mejor tenis y frustró a su rival.
Después de ese arranque dominante Galán se repuso gracias, en parte, a los errores no forzados que empezó a entregar con cuentagotas el serbio. Así recién en el segundo set sumó su primer game con el servicio y recibió los aplausos del puñado de asistentes al Philippe Chatrier.
La lluvia, sin embargo, interrumpió el partido cuando Djokovic estaba 2-1a. Si bien ya habían caído algunas gotas, un resbalón de Galán provocó la preocupación y la queja de Djokovic. Fue entonces cuando el duelo se detuvo y entró en escena el showman.
Mientras el techo se cerraba lentamente, los ball boys colocaron la lona y, minutos después, ingresaron los cancheros a tirarle polvo de ladrillo a la cancha. Entonces la gente comenzó a gritar “olé” ante cada palada y Djokovic la alentó, primero sentado en su silla y luego parado y motivado por la ola que empezó a girar en las tribunas.
Sin embargo no se conformó con eso. Con el partido parado Djokovic tomó su raqueta e intentó alisar el polvo de ladrillo.
Ante la imposibilidad de hacerlo recibió un secador de uno de los integrantes del staff del torneo y se puso él también a secar y a aplanar la superficie para que minutos después se reanudara el juego.
Si bien Galán volvió a sumar con el saque y quedó 4-3 abajo con el break, no pudo evitar que Djokovic acelerara en el final, sumara con su servicio y volviera a quebrarlo para quedarse con el segundo parcial.
Si bien sus números de efectividad ya no se parecieron a los del primer capítulo, Djokovic mantuvo su servicio durante todo el partido que cerró con comodidad por 6-0, 6-3 y 6-2 poniéndole fin a una historia que lo tuvo dos horas y ocho minutos en la cancha. Con el triunfo llegó a los 71 en el torneo, uno más que el suizo Roger Federer y sólo superado por el español Rafael Nadal, que tiene 96.
Djokovic se despidió también a su
estilo: hablando francés. “Estoy contento, creo que le pegue bien a la pelota, fui agresivo. Y espero que lo hayan disfrutado”, contó sobre sus sensaciones después del encuentro. “Gracias, profesor de francés”, cerró con una sonrisa en un mensaje reproducido a todo el mundo para quien intenta enseñarle ese idioma.
Su próximo rival será Karen Khachanov que derrotó al chileno Cristian Garin por 6-2, 3-6, 6-4 y 6-2. El ruso venció a Djokovic en París en 2018, pero fue en la final del Masters 1.000 bajo techo que se juega en esta ciudad. Aquella fue la mejor semana de Khachanov en su carrera.w