Con el coronavirus en alza, España celebró su 12 de Octubre más incómodo
La pandemia rediseñó una fiesta nacional que suele ser a toda pompa. La crispación política marcó toda la jornada.
En una Madrid soleada y bajo el estado de alarma con el que el gobierno nacional la encorsetó por el alza de contagios de coronavirus, España celebró ayer su fiesta nacional más atípica e incómoda de los últimos años.
La pandemia redujo el despliegue de la pompa habitual que cada 12 de octubre honra lo que los españoles llaman el Día de la Hispanidad a un módico desfile que redujo a poco más de 500 militares los más de 4.000 que lo hacen cada 12 de octubre para conmemorar la llegada de Cristóbal Colón a América.
La ceremonia, encabezada por el rey Felipe VI, la reina Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía, reunió esta vez en la Plaza de la Armería del Palacio Real a personajes de la escena política española que hubieran preferido no verse las caras. Ni siquiera con el barbijo reglamentario que impuso la era Covid.
Como les sucedió al jefe del gobierno español, Pedro Sánchez, y a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que se saludaron con frialdad civilizada. Díaz Ayuso acusa a Sánchez de liderar el gobierno más autoritario de la democracia y le pide que hoy, martes, levante el estado de alarma que impuso para Madrid capital y ocho ciudades de su comunidad sin aprobación de la presidenta regional.
El gobierno nacional decretó el estado de alarma para Madrid el viernes luego de que el Tribunal de Justicia de Madrid anulara el confinamiento perimetral y otras restricciones en la movilidad y en la vida social de los madrileños que el Ejecutivo había establecido para aquellos distritos de la comunidad en los que los casos positivos de Covid superaban los 500 cada 100.000 habitantes en las últimas dos semanas.
Otra novedad de este día de fiesta nacional español sin precedentes fue la presencia del vicepresidente segundo del gobierno español y líder de Podemos, Pablo Iglesias, y de los ministros que pertenecen a su partido. En años anteriores, Iglesias y los suyos, fervientes partidarios de que una república reemplace lo antes posible a la monarquía parlamentaria vigente hoy en España, evitaron asistir al besamanos en el Palacio Real.
La pandemia borró de un plumazo todo gesto de reverencia que implique contacto físico pero Iglesias, crítico a la figura del rey y cuando un juez acaba de pedir al Tribunal Supremo que lo investigue por presuntos delitos en el caso del robo del celular de una ex asesora suya, debió fingir demencia y saludar a Felipe VI.
La monarquía no vive días felices: la salida por la puerta de servicio del rey emérito Juan Carlos, que en agosto prefirió esfumarse a Emiratos Arabes mientras la justicia investiga si cometió o no ilícitos financieros, y los embates de la izquierda a la izquierda del gobierno de coalición PSOE-Podemos desgastan su figura y plantean interrogantes sobre su futuro.
Un encuesta de la Plataforma de Medios Independientes elaborada por el instituto de opinión 40dB a más de 3.000 personas señala que, de realizarse hoy un referéndum sobre la monarquía, el 40,9 % de los españoles apoyaría la república.
El destino de la monarquía, sin embargo, no se puso en juego este lunes en el acto del 12 de octubre al que asistieron, además, 12 de los 17 presidentes autonómicos. Excepto los del País Vasco y Cataluña, que no suelen acudir a la ceremonia que ensalza la Hispanidad, otros prefirieron no viajar hasta Madrid por la pandemia.
Según la ley 18/1987 que estableció al 12 de octubre como día de la Fiesta Nacional de España, la celebración, que este año duró sólo una hora, tiene como objetivo “conmemorar los momentos de la historia colectiva que forman parte del patrimonio histórico, cultural y social común, asumido como tal por la gran mayoría de los ciudadanos”.
Desde México, su presidente, Andrés López Obrador, aprovechó la fecha para reclamar, una vez más, que España pida perdón por haber conquistado América y por el modo en el que se hizo. “Es mejor que todos, con humildad, ofrezcamos disculpas a los pueblos originarios y se procure iniciar una etapa nueva en nuestras relaciones”, dijo López Obrador.
Esta edición 2020 se realizó sin que los madrileños conocieran las cifras actualizadas del Covid, que no se suministran durante el fin de semana. Hasta el viernes, Madrid había registrado 261.762 personas que se enfermaron con el virus desde que hizo pie en España, a fines de enero. Entre el jueves y el viernes, se diagnosticaron 2.256 nuevos casos.■