En una polémica decisión, el gobierno español indultó a los nueve secesionistas catalanes
Están presos por el intento de romper con España en 2017. El indulto perdona la pena, no el delito. El presidente Sánchez dijo que busca “restablecer la convivencia”.
Un año y ocho meses después de haber sido condenados por intentar la independencia de Cataluña en 2017, los nueve políticos soberanistas catalanes presos fueron indultados ayer y es probable que salgan en libertad en menos de 24 horas.
El presidente Pedro Sánchez aprobó este martes los indultos para el ex vicepresidente catalán, Oriol Junqueras; cinco de sus ex ministros; la titular del Parlamento y dos líderes sociales, que cumplen penas de entre 9 y 13 años por sedición, malversación y desobediencia.
Fueron encarcelados y juzgados por haber organizado el referéndum de autodeterminación ilegal de 2017, colaborar en la elaboración de las leyes de desconexión con las que Cataluña se separaría de España y participar en la fallida declaración unilateral de independencia que desembocó en el cese del gobierno de la Generalitat y la intervención de la autonomía catalana por el gobierno que presidía Mariano Rajoy.
“Existen razones de utilidad pública que aconsejan conceder los indultos. Tienen que ver con la necesidad de restablecer la convivencia y la concordia en el seno de la sociedad catalana y en el conjunto de la sociedad española”, dijo Sánchez en un mensaje a toda España.
“Esta medida de gracia no exige que los beneficiados por ella deban cambiar sus ideas. No esperamos tal cosa”, agregó. De hecho, las personas sancionadas no fueron castigadas por sus ideas sino por sus actos contrarios a la legalidad democrática.
Los indultos a los independentistas los pondrán en libertad, pero no perdonarán la inhabilitación que pesa sobre todos ellos para ejercer cargos públicos. Las medidas tendrán, además, una condición: estarán vigentes mientras los indultados no vuelvan a cometer un delito. Es decir no insistan en la ruptura.
Desde el Palau de la Generalitat de Barcelona, el presidente catalán Pere Aragonès, también habló sobre la actitud con la que los líderes independentistas abandonarán, en horas, sus celdas: “Salen con la cabeza bien alta y con las ideas intactas. Y salen con la voluntad reforzada de construir la república catalana, libre y justa, europea y próspera”, dijo Aragonès. Horas antes, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, advirtió que el “gobierno no va a convocar un referéndum en Cataluña de autodeterminación ni va a permitir una declaración unilateral de independencia”.
El indulto es una medida de excepción y de gracia por la cual el Estado decide perdonar total o parcialmente el cumplimiento de su pena a alguien que fue condenado y cuenta con sentencia firme. No lo exime, sin embargo, de reparar el daño causado. El indulto se diferencia de la amnistía, que es lo que reclama el independentismo catalán en que perdona sólo la pena mientras que la amnistía perdona el delito.
El Boletín Oficial del Estado publicará este miércoles los indultos y, a partir de ese momento, el Tribunal Supremo dictará su ejecución, aunque antes deberá resolver si admite o no los pedidos de anulación con los que se inflaman, desde hace semanas, los partidos de derecha, centro y extrema derecha. Partido Popular, Ciudadanos y Vox quieren recurrir los indultos ante el Tribunal Supremo. Vox definen los indultos Como “un golpe de Estado desde las instituciones”.
La salida de prisión de los nueve indultados podría producirse este miércoles al mediodía. Si no se llegara a tiempo con el procedimiento legal que efectivizará el indulto, los líderes independentistas saldrán de prisión, de todos modos, por los permisos ordinarios que ya tenían concedidos por el feriado del 23 de junio en Cataluña, la Fiesta de Sant Jordi.
Habrá que ver cuál será la hoja de ruta del independentismo catalán el día después de los indultos. Está previsto un recibimiento con los brazos abiertos en el Palau de la Generalitat a los recién liberados y un viaje a Bélgica, más precisamente a Waterloo, donde se asiló el ex presidente catalán Carles Puigdemont, autoexiliado. A los indultados les quedaban por cumplir entre 5 y 9 años de cárcel. El presidente Sánchez se presentará el 30 de junio en el Congreso para explicar por qué decidió liberarlos. ■