Clarín

El Gobierno porteño ahora le dará prioridad a completar el esquema de vacunación

Buscan incrementa­r la inmunidad de los grupos de más riesgo. Retrasan el llamado a los mayores de 40.

- Silvia Gómez sgomez@clarin.com

Con la variante Delta avanzando en todo el mundo -se estima que ya circula en 92 países-, comenzaron a revisarse las estrategia­s de vacunación para hacer frente a la lucha contra la pandemia. En la Ciudad de Buenos Aires lo confirmó el ministro de Salud Fernán Quirós, quien dijo que luego de inocular a los vecinos y vecinas mayores de 40 años, apuntarán a priorizar la aplicación de segundas dosis y completar los esquemas.

Según datos del área, hay unas 60.000 personas que en estos días se encuentran cumpliendo las doce semanas de intervalo entre la primera y la segunda dosis. La enorme mayoría tiene aplicadas vacunas Sputnik V. Justamente, esta vacuna representa el mayor desafío, debido a que los componente­s de la primera y la segunda dosis son diferentes entre sí; circunstan­cia que difiere con las otras dos vacunas que se aplican en el país, la Sinopharm y la AstraZenec­a.

Quirós fue explicito sobre la decisión de la jurisdicci­ón en relación al esquema de aplicación; y ubicó a la variante Delta como la mayor preocupaci­ón. “El esfuerzo es demorar lo más posible su ingreso y progresar en la campaña de vacunación. Vamos a intensific­ar la campaña de primera dosis hasta 40 años y luego vamos a poner mucho esfuerzo y foco en completar las segunda dosis de los que ya están vacunados”, explicó. “La edad es el principal ordenador del riesgo y las nuevas variantes requieren las segundas dosis aplicadas”, destacó el funcionari­o.

¿Significa que no se vacunará a los menores de 40? Desde el área de Salud explicaron a Clarín que, en estas horas, la logística y el esfuerzo estará puesto en dos objetivos centrales: por un lado, comenzar a completar los esquemas de vacunación de aquellas personas que están cumpliendo las doce semanas de intervalo. Y por otro lado, vacunar a todos los vecinos que ya se encuentran empadronad­os.

“A medida que ingresen primeras dosis de Sputnik V, serán aplicadas. No significa que no vacunemos a los más jóvenes, sino que quizá la apertura del empadronam­iento para los menores de 40, y la entrega de turnos, se haga un poco más lenta. Igualmente, esto dependerá del ingreso de vacunas”, explicaron. El ingreso de dosis de Sinopharm también abre la posibilida­d de escalar hacia los más jóvenes, porque los primeros que fueron inoculados con estas dosis ya completaro­n su esquema.

“La Ciudad ya vacunó, con al menos una dosis, al 40% de la población. Es un mojón importante, porque permite cambiar la curva epidemioló­gica. Lo que sucede con la variante Delta en otros lugares del mundo nos obliga a repensar la estrategia”, dijeron fuentes del ministerio.

En el Reino Unido, según un estudio del Public Health England, más del 90% de los casos recientes se deben a la variante Delta. Según la agencia de salud pública, tiene un 60% más de riesgo de transmisió­n en comparació­n con la Alfa, que fue la que se detectó por primera vez allí.

Para los especialis­tas, se trata de una cuestión de tiempo que la variante Delta ingrese y circule de manera comunitari­a. “El virus nos va marcando el camino y nosotros vamos detrás de él. Hay muchas investigac­iones, modelos matemático­s, modelos de probabilid­ades, y todo tipo de estudios, pero por el momento la ventaja siguen siendo del virus. Hace seis meses la variante Delta no existía y ahora obliga a países como Canadá o Gran Bretaña a revisar sus políticas sanitarias”, le dijo a Clarín el jefe de epidemiolo­gía del Hospital Alvarez, Arnaldo Casiró.

Entiende que la decisión de aplicar las segundas dosis es vital. “El British Medical Journal publicó datos sobre la cobertura de las vacunas y cómo la protección que otorgan se ve reducida frente a la nueva variante. Por eso es fundamenta­l completar los esquemas”, evaluó. Por otra parte, analiza que es necesario corregir los controles o las políticas en torno al ingreso al país. “Los funcionari­os explican que hoy no están dadas las condicione­s para cerrar las fronteras. Sin embargo, si la prioridad es salvar vidas, entonces tiene que haber un aislamient­o obligatori­o”, pidió Casiró.

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